La Habana. Un equipo forense halló los restos de los 14 desaparecidos en el reciente incendio petrolero ocurrido hace dos semanas en la Base de Supertanqueros de la ciudad cubana de Matanzas, a unos 100 kilómetros al este de La Habana, informaron este miércoles autoridades.
"Se encontraron 14 grupos de fragmentos de restos óseos en el lugar", dijo en rueda de prensa el doctor Jorge González, presidente de la Sociedad Cubana de Medicina Legal y líder del equipo que realizó en 1997, en Bolivia, la búsqueda y hallazgo de los restos del mítico guerrillero argentino-cubano Ernesto Che Guevara.
El experto aclaró que resultó imposible identificar de manera individual a cada desaparecido por las altas temperaturas que generó el incendio y que impiden incluso la realización de pruebas de identificación por ADN.
El siniestro, que además de los 14 desaparecidos dejó dos muertos y 132 lesionados, comenzó el pasado día cinco por la caída de un rayo en un tanque con 26 mil metros cúbicos de combustible y después las llamas se extendieron a otros tres depósitos.
Este viernes se realizarán las honras fúnebres en el Museo de los Bomberos, en Matanzas, y en la tarde los restos serán inhumados en el Panteón de Caídos en la Defensa, en el cementerio de la ciudad.
El Gobierno decretó desde mañana dos días de duelo oficial en los que estará a media asta la bandera nacional en homenaje a los caídos en el siniestro.
"El control y extinción del incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas constituyó un acto heroico en el que prevaleció el coraje personal y colectivo y significó una nueva epopeya de nuestro pueblo", indicó el anuncio oficial difundido por la televisión nacional.
La Base, que mantuvo intactos otros cuatro tanques de 50 mil metros cúbicos, es el principal depósito del combustible para las centrales termoeléctricas de la isla, que se trasiega desde buques de gran calado.
Aunque aún no se contabilizan los daños, se suponen que serán cuantiosos por la pérdida de miles de metros cúbicos de crudo y fuel oil almacenados en los cuatro depósitos calcinados.
El accidente tuvo lugar en momentos en que la isla vive fuertes tensiones con la generación eléctrica por la falta de combustible, roturas en las plantas generadoras y mantenimientos programados en algunas de esas usinas.
El déficit de generación eléctrica obligó al Gobierno cubano a programar apagones en todo el país, incluida La Habana, capital y principal núcleo urbano.
El siniestro en Matanzas ocurrió apenas tres meses después de la explosión accidental de un camión cisterna cargado de gas licuado en el habanero Hotel Saratoga, que dejó 46 muertos y más de medio centenar de heridos, así como la destrucción casi total del inmueble.