Las “crecientes muertes y detenciones” de migrantes registradas tanto en Puebla, como en otras partes del país y en otras naciones, “siguen siendo resultado directo de las políticas migratorias que priorizan la militarización y la contención de flujos en tránsito irregular”, afirmaron el Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría SJ, la Universidad Iberoamericana en Puebla y el Servicio Jesuita a Migrantes México (SJM México).
Mediante un pronunciamiento conjunto, expresaron sus condolencias a las familias de los migrantes fallecidos, y su solidaridad con los heridos de la volcadura de una camioneta el viernes pasado en una carretera en el municipio de Cañada Morelos, Puebla. “Entre las víctimas mortales se encuentran al menos tres niños, un bebé y adultos que provenían de Cuba, Venezuela y Ecuador”, indicaron.
“Entorno torturante”
A la vez, manifestaron su “profunda preocupación por la detención de casi 700 personas, principalmente originarias de Centroamérica, en dos operativos migratorios en Puebla”.
Recordaron que la estación migratoria en esa entidad tiene capacidad únicamente para 60 personas, y existen reportes de maltratos, abusos y condiciones insalubres, en particular para mujeres, familias y niñez, “tratándose de un espacio que podría clasificarse como un entorno socialmente torturante”.