Mineral del Monte, Hgo. El senador morenista Napoleón Gómez Urrutia se pronunció, durante la conmemoración del 256 aniversario de la primera huelga minera realizada en América en Real del Monte, Hidalgo a favor de una ley integral en el sector minero, a fin de que, por medio de la supervisión de las minas que operan con condiciones laborales para los trabajadores que rayan en la esclavitud, se eviten percances como el que ocurre en la mina El Pinabete, en Coahuila; al tiempo de que dijo estar en contra del fracking como método extractivo en el país.
Tras aclarar que los trabajadores de esa mina —10 de los cuales aún permanecen atrapados— donde ocurrió el derrumbe no están afiliados al Sindicato Nacional de Mineros, Gómez Urrutia dijo que “primero queremos organizar a todos los trabajadores de esta zona (en referencia a la carbonífera de Coahuila); segundo, queremos hacer una reforma integral a la Ley Minera de México para que se garantice la seguridad, libertad, democracia y justicia laboral para todas y todos los trabajadores aunque no sean miembros de nuestro sindicato como es el caso de los compañeros que trabajan en ese pozo de Agujita”.
Dijo que también “estaremos buscando que en esa reforma se establezcan los términos y condiciones para que los patrones cumplan con sus obligaciones y sus responsabilidades laborales”.
“Es muy lamentable, es una tristeza y es algo que los mineros de México, los organizados dentro de nuestro sindicato nacional nos sentimos totalmente en solidaridad con ellos con sus familias y esperamos que muy pronto los podamos rescatar y con vida”, comentó el también presidente del Sindicato Nacional de Mineros.
No obstante, aseveró que de manera frecuente, en la región carbonífera de Coahuila ocurren este tipo de accidentes. “En muchos de estos pozos porque ni siquiera son minas propiamente de carbón de la zona carbonífera suceden frecuentemente estas tragedias, estos accidentes o desastres. Es algo que no ha podido ser evitado ni por las autoridades locales de Coahuila ni por las autoridades federales”.
Agregó que se calcula que hay más de cinco mil trabajadores laborando en pésimas condiciones de seguridad, infrahumanas y todo por la ambición y avaricia de empresarios que lo único que quieren es la explotación del carbón, venderlo y obtener una utilidad sin tomar en cuenta la vida y la salud de los trabajadores.
Aseguró que varias de estas minas o pozos de carbón operan de forma clandestina, sin tener las concesiones correspondientes y donde los trabajadores laboran “en condiciones de esclavos”.
Por ello se pronunció a favor de que haya más inspecciones y supervisiones por parte de las autoridades, principalmente de la Secretaría de Economía sobre la forma de operar de estos pozos y minas así como de las concesiones que se han otorgado.