La selección femenil Sub-20 quedó al borde de la eliminación en la segunda jornada del Mundial de la categoría. Sin goles, el equipo mexicano empató con Colombia (0-0) en el estadio Nacional de Costa Rica y se jugará sus últimas cartas el martes ante Alemania, que aplastó por 3-0 a Nueva Zelanda y se ubicó en el segundo lugar, en busca del pase a la siguiente ronda.
Las tricolores llegaron obligadas a buscar el triunfo, sabedoras de ocupar el tercer puesto en el Grupo B y encarar la tercera fecha ante una de las favoritas a ganar la Copa. La presión, sin embargo, fue una arma de doble filo. A la vez que motivó un esfuerzo mayor desde los primeros minutos, también provocó su desesperación en la parte final.
No encontraban las colombianas su sitio en la cancha, mientras el Tri peloteaba y presionaba fuerte desde la salida. El pase no fue el hilo del juego de las mexicanas, sino los remates de larga distancia. Probaron suerte Jana Gutiérrez y Anette Vázquez, pero las dos estuvieron peleadas con el gol.
A juzgar por los primeros 30 minutos, no se sabe muy bien qué partido habían visualizado las cafetaleras. La velocidad les sirvió como principal herramienta, aunque hubo momentos en que no ligaron más de tres pases seguidos. A pesar de eso, las dirigidas por Ana Galindo no tuvieron la explosión ofensiva que tanto necesitaban.
Natalia Mauleón lo intentó sin éxito con remates de cabeza de la misma manera que Alexia Villanueva, quien fue perdiéndose como la única referencia en el ataque. Colombia se aprovechó de eso para mostrar su buen trato con la pelota, además del desequilibrio de Linda Caicedo, considerada una de las mejores jugadoras del certamen.
Con un par de chispazos metieron en problemas a la zaga conformada por Kinberly Guzmán y Samantha López Archila; no obstante, siguieron con la pólvora mojada.
La más clara de México surgió de los pies de la mediocampista Alice Soto, quien, desde más de 30 metros, probó los reflejos de la portera Natalia Giraldo con un bombazo de derecha que terminó en un tiro de esquina. Luego, América Frías entró por el costado izquierdo y, en lugar de disparar a puerta, intentó centrar desperdiciando otra oportunidad de oro.
Mientras el “¡Sí se puede!” tomaba fuerza en las tribunas del estadio, las mexicanas agotaban sus recursos con tal de marcar diferencia en el marcador. Hubo centros, empujones y remates desviados sin un claro destino, producto de su urgencia y desesperación. Galindo las animó en todo momento, pero no encontró ninguna reacción positiva pese a mantener su dominio.
Ahora, con sólo dos puntos de seis, el combinado nacional enfrentará el martes a las teutonas –sublíderes con tres unidades– en la tercera fecha del Mundial sin otra opción más que ganar para avanzar a la siguiente ronda. Cualquier otro resultado en el estadio Alejandro Morera Soto consumará su eliminación. El empate, por otro lado, le sirvió a las cafetaleras para posicionarse como líderes de grupo con cuatro puntos.