Matanzas. Las autoridades de Cuba priorizaron este sábado la búsqueda de los desaparecidos que dejó el incendio en una base de supertanqueros de Matanzas (oeste), sin revelar aún estimados del impacto económico del siniestro.
"Atrás quedó el dantesco escenario de un incendio descomunal que mantuvo en vilo a toda Cuba. Extinguidas las llamas comienza otra etapa muy dolorosa: la búsqueda de los desaparecidos", escribió la presidencia de la república en la red social Twitter.
Según fuentes oficiales, unos 60 expertos de Medicina Legal y Criminalística rastrean los restos de los bomberos golpeados por una súbita explosión durante la madrugada del 6 de agosto, cuando intentaban apagar las llamas en el primer tanque incendiado.
En las primeras horas fueron encontrados restos óseos de cuatro personas, con lo cual aumentó a seis la cifra de fallecidos confirmados en el fuego, considerado el peor en la historia de esta nación caribeña.
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, orientó el viernes el levantamiento de las afectaciones en la zona industrial de Matanzas, y el diseño de una estrategia para recuperar lo posible a corto, mediano y largo plazo, sin aportar detalles.
La tragedia se desató el 5 de agosto, cuando un rayo impactó un tanque con cerca de 25 mil metros cúbicos de petróleo, el cual se incendió y las llamas se propagaron a tres depósitos aledaños, algunos de ellos repletos de carburante.
Amén del crudo perdido, ya sea por su derrame o combustión, los cuatro depósitos e instalaciones aledañas fueron consumidas por el fuego, el cual provocó roturas que también afectaron a la cercana central termoeléctrica Antonio Guiteras.
A su vez, especialistas del Centro de Investigación y Manejo Ambiental del Transporte realizan estudios de la calidad del aire en la zona afectada, en busca de concentraciones de orgánicos volátiles, partículas, dióxido de carbono y dióxido de nitrógeno.