Llegar a los 25 años suele ser una señal de alcanzar la edad adulta, un signo para dejar de lado todas las cosas infantiles. No para South Park protagonizada por Stan, Kyle, Kenny y Cartman.
El elemento básico del canal televisivo Comedy Central sobre cuatro jóvenes malcriados, perpetuamente envueltos en un desquiciado pueblo de dibujos animados de Colorado, celebró su boda de plata avanzando, alimentado por chistes sobre caca y una sátira social afilada.
Sólo algunos de sus blancos a lo largo de los años incluyen religiones como el cristianismo, el Islam y la cienciología, así como los que niegan el cambio climático, las criptomonedas, Phil Collins, Tiger Woods, las prohibiciones de fumar, Game of Thrones y los pedófilos. Una de sus estrellas infantiles solía morir en cada episodio, violentamente.
“Algunas personas dicen, ‘vaya, no puedo creer que se hayan burlado de eso porque es algo muy importante’. Y es exactamente por eso que nos burlamos de eso”, dice Trey Parker, quien creó el programa con Matt Stone.
El concierto, que debutará hoy en Comedy Central y llegará a Paramount+ mañana, contará con canciones de la historia de la serie. Stone lo llama “una celebración, una fiesta y una retrospectiva”. Se emite a la misma hora y el mismo día de hace 25 años que estrenó.
Desde el primer episodio del programa ganador del premio Peabody en 1997, Parker y Stone han difuminado el límite entre el buen gusto y el malo, incluso más que esa otra caricatura para adultos de larga duración, Los Simpson.
South Park tenía una caricatura de Jesse Jackson que insistía en que el padre de Kyle le besara el trasero para disculparse por su uso de un insulto racial y mostraba a Jesucristo defecando sobre el ex presidente George W. Bush y la bandera estadunidense.
“Por mucho que amo Los Simpson creó que South Park definitivamente ha hecho más cosas , dice el doctor Jonathan Gray, profesor de estudios culturales en la Universidad de Wisconsin-Madison, cuyos libros incluyen Watching with The Simpsons: Television, Parody and Intertextuality.
“Odian a las celebridades cuando éstas intentan decirnos cómo llevar nuestras vidas”, menciona Gray. “Algunas de sus críticas son las que unen a la izquierda y la derecha. Como si todos encontráramos la cultura de las celebridades vacía.”
South Park es la serie que nos dio referentes culturales como Cheesy Poofs, ManBearPig y Mr. Hankey, the Christmas Poo, assí como el profesor Chaos y el general Disarray y la vista de Cartman vengándose de un matón haciéndolo comerse a sus propios padres y luego lamiendo alegremente las lágrimas de su rostro.
Se ha transformado en largometrajes como South Park: Bigger, Longer & Uncut, que obtuvo una nominación al Óscar a la mejor canción original, y videojuegos como South Park: The Stick of Truth. En Broadway, su musical sobre los mormones ha sido un éxito desde 2011.
El Consejo de Televisión de Padres, que espera restaurar la “decencia en la industria del entretenimiento”, ha criticado con frecuencia la serie televisiva, calificándola de “hogar del sexo gráfico y la violencia”.
Parker y Stone se unieron por primera vez como fanáticos de Terry Gilliam y la compañía de comedia Monty Python. Cortaron y pegaron a mano sus primeros dibujos animados de South Park con papel de construcción y encontraron una libertad en el método discreto.
“Si hubieras presentado el programa y dicho ‘Oh, ¿y está este niño de ocho años y muere violentamente y no es genial?’ Bueno, eso nunca funcionaría. Incluso en una buena animación eso no es divertido, pero con papel de construcción, es gracioso”, señala Parker.
Del papel a las computadoras, el espectáculo continúa. Ha sido un generador de GIF y memes: “¡No estoy gordo, tengo huesos grandes!” “¡Ah, hamburguesas!” y “¡Respeta mi autoridad!”
Celebrar su 25 aniversario con un concierto tiene sentido ya que la música ha estado en el corazón del espectáculo. Se han utilizado unas 100 canciones a lo largo de los años, y South Park: Bigger, Longer & Uncut fue en sí misma una película musical. Parker y Stone se consideran menos animadores y más miembros de una banda.
“Cuando entramos en una nueva temporada, vamos al estudio como una banda y no tenemos idea de lo que va a salir”, declara Parker. “Siempre nos sorprendemos al final de la temporada como, ‘Oh, ¿hicimos eso? ¡Eso es una locura!’ Eso es lo que lo mantuvo divertido y fresco durante 25 años”.