Nuestro país es un territorio rico en yacimientos de litio. Este elemento es importante para la industria mundial, ya que se necesita para las baterías de los autos eléctricos. ¿Cómo debe administrarlo México? Los resultados aparecen en la gráfica.
Metodología
El sondeo fue distribuido por redes sociales. Participaron 875 personas; en Twitter, 335; en El Foro México, 484, y en Facebook, 56. Usamos la app SurveyMonkey. Pueden participar todos, cualquiera que sea su ideología, no sólo lectores de La Jornada o de la sección Dinero.
La industria de los carros está matando al planeta aunque sean eléctricos. Se debe erradicar la cultura cochina para dar paso a otro tipo de movilidad sustentable. Por el lado del litio, su implementación en el sector nacional impulsaría la mejora de tecnologías que puedan colocar a México en el mercado.
@Fguerrero95 / Querétaro
Como propiedad exclusiva de la nación, el Estado podrá negociar con quien lo considere conveniente, sin ceder los derechos del suelo como lo hicieron los neoliberales con las minas, las playas, los bosques. La riqueza de México debe beneficiar a los mexicanos, no a los extranjeros.
@Guadalupebarbo6 / Zacatecas
Concesiones limitadas a sólo 20 años y participación en las utilidades, con pago de impuestos.
@chewis100 / Mexicali
Un régimen mixto, con una cuidadosa selección de la IP, pienso sería la mejor opción dada la gran inversión que se requiere para explotar ecológicamente ese recurso.
Alexandro Simancas / CDMX
Como mineral estratégico, el litio debe ser extraído, procesado y comercializado por el gobierno mexicano. Que los ingresos por venta de litio beneficien al pueblo.
@IezJrmt / Morelos
El Foro México
Un aprovechamiento y administración del litio sin corrupción, desarrollo de tecnología para crear productos derivados y un comercio en condiciones justas para la exportación. El litio es estratégico.
Pedro Martínez / Edomex
Ni un gramo para la IP, bastante ha saqueado y su irresponsabilidad está en Larrea, las cerveceras, refresqueras, mineras, etc. Son tiempos de un regreso de la propiedad social.
Francisco Javier Contreras Díaz / Zacatecas
Concesiones mixtas, no corrompidas, bien vigiladas y negociadas a favor de la comunidad, con reglas muy claras.
Arturo Reséndiz / Edomex
Al igual que el petróleo, es tiempo de que México deje de ser un simple extractor de materias primas y genere tecnologías para el procesamiento del mineral. La soberanía energética comprende contar con industria propia, de otra forma es pura demagogia.
Martín Herrera / CDMX
Cualquier empresa interesada podría adquirir el litio del gobierno. No debería haber problema con quién lo venda, si lo que les interesa es la adquisición de un insumo. Pero muchas empresas hoy sólo buscan especular.
Héctor Ulloa / Toluca
Debe mantenerse el dominio de la nación siempre y cobrar impuestos y/o regalías a los privados, que sean justos y adecuados desde el punto de vista de la nación para invertir en programas sociales como salud y educación.
Carlos Dellano / CDMX
Toda la riqueza natural de la nación pertenece por derecho al pueblo y debe, por tanto, explotarse en su beneficio; cualquier concesión implica transferir esa riqueza al capital privado y contribuir a aumentar la desigualdad económica.
Mauricio Alfredo Herrera / CDMX
Dárselo a los empresarios implicaría que ellos sólo se hagan más ricos y no necesariamente que paguen lo justo a sus empleados o brinden un valor a la sociedad, nadie lo hace en México, ya sea por falta de recursos o por tacañería.
Jonathan Morales / CDMX
Debemos, y se lo debemos a la nación, crear tecnología sustentable; los jóvenes de México tienen capacidad para desarrollarla, es obligación de los gobernantes dar bases y condiciones para sacar adelante esa tecnología.
Pedro A. Miranda / Hermosillo
Si lo explota el gobierno va a terminar como la CFE y Pemex; propiedad de sindicatos corruptos y alta burocracia. Si lo hace la iniciativa privada, el pueblo no va a recibir beneficio alguno. Es mejor dejarlo para el tiempo en que nuestro país lo pueda aprovechar sin recurrir ni depender de extranjeros.
Antonio Ortiz / Ensenada