Ante el estancamiento de la producción manufacturera, la actividad industrial mexicana se moderó durante junio, pero mantuvo un mayor ritmo de crecimiento a tasa anual.
De acuerdo con el Indicador Mensual de la Actividad Industrial (IMAI), que calcula el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la producción industrial mexicana avanzó 0.1 por ciento en el sexto mes del año respecto a mayo cuando creció 0.2 por ciento mensual, con cifras desestacionalizadas, su peor comportamiento en cuatro meses y afectado por dos de sus cuatro componentes.
El IMAI se ubicó en 101.5 puntos en junio, lo que representó que la actividad industrial del país está 0.39 por ciento por debajo de su nivel prepandemia de enero de 2020 y 4.3 por ciento en comparación con su máximo previo en septiembre de 2015.
Con series ajustadas por estacionalidad para hacer comparables los periodos, la minería creció 2.1 por ciento respecto a mayo; la construcción avanzó 0.3 por ciento; mientras la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final cayó uno por ciento en el periodo de referencia.
Por su parte, las industrias manufactureras no mostraron variación mensual en junio, luego del marginal avance mensual de mayo de 0.2 por ciento.
“Las manufacturas registran afectaciones ante la expectativa de una desaceleración en Estados Unidos, principal socio comercial del país”, reconoció Ricardo Aguilar, economista en jefe de Invex.
La actividad industrial tuvo un alza mensual durante junio, cifra que refleja estancamiento para el sector industrial en el mes. Así, por ahora, la coyuntura local no se asemeja a la de una recesión, pues salvo pocas actividades como la edificación o la producción de productos derivados del petróleo, que enfrentan inercias muy negativas, la industria ofrece resultados mixtos en la mayoría de los casos, describió Marcos Arias, analista económico de Monex.
“El resultado ayuda a corroborar el cuadro de mayor resiliencia en la economía mexicana durante el cierre del segundo trimestre. El resultado favorece revisiones al alza para los pronósticos del PIB para el 2022”, consideró Arias.
La actividad industrial de México registró un crecimiento de 3.8 por ciento a tasa anual durante el sexto mes del año con respecto al mismo mes de 2021.
Por sector de actividad económica, las industrias manufactureras se desaceleraron a 5.2 por ciento anual en junio; la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final, bajaron su ritmo de crecimiento interanual a 3.8 por ciento; la minería y la construcción aceleraron su avance en junio con relación al mismo mes del año pasado a 2.2 por ciento cada uno.
Con cifras originales, la actividad industrial registró un aumento de 3.2 por ciento en los primeros seis meses del año, con respecto al mismo periodo de 2021.