Un ciudadano estadunidense con residencia en México es la primera persona juzgada en Estados Unidos con la nueva ley que declara el tráfico de armas como delito federal.
Said Isaac Hernández, de 25 años, fue acusado por un gran jurado federal en Laredo, Texas, por haber comprado en un periodo de dos años 231 pistolas de calibre 9 milímetros, 380 y 22 para el crimen organizado en México, en un esquema semejante al descrito por el gobierno mexicano en la demanda que interpuso en agosto de 2021 en una corte federal estadunidense contra el comercio negligente e ilícito de armamento desde ese país.
El acusado enfrenta una posible condena de hasta 15 años de prisión, de acuerdo con información de las autoridades estadunidenses.
El embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, sostuvo en las redes sociales que su país investigará y procederá contra traficantes de armas con toda la fuerza de la ley.
El pasado 25 de junio, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó la Ley de Comunidades más Seguras, la primera legislación en más de 30 años que restringe el uso de armas, que entre otros puntos tipifica el tráfico de armas como delito federal. La ley fue aprobada días después de que un tirador mató a 21 personas en una primaria de Uvalde, Texas, comunidad con gran parte de población de origen mexicano.
En tanto, México denunció el año pasado a los fabricantes de armamento, a quienes reclama una compensación económica para reparar los daños sufridos por sus prácticas negligentes, pero su principal motivación es que las empresas adopten estrictas medidas de autorregulación para evitar el mercado ilícito.
Cada año se trafican ilegalmente más de medio millón de armas desde Estados Unidos a México. Sólo en 2019, estas armas fueron responsables de más de 17 mil homicidios dolosos en el país, y se calcula que los daños causados por este tráfico ilegal ascienden a 1.5 por ciento del PIB mexicano, de acuerdo con la SRE.
Hernández fue detenido el 11 de julio cuando viajaba hacia el sur del territorio estadunidense por la Interestatal 35 en dirección al puerto de entrada de Laredo. Al parecer, las autoridades descubrieron 17 armas de fuego escondidas en su coche.
El acusado había sido objeto de una investigación relacionada con la compra de 231 armas de fuego del 21 de enero de 2020 al 11 de julio de 2022, para luego transportarlas a México.
La Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos realizó la pesquisa. Lleva el caso el fiscal federal adjunto Michael Makens.
