Bogotá. Francia Márquez Mina, quien hoy se convertirá en la primera mujer afrodescendiente en llegar a la vicepresidencia de Colombia de la mano de Gustavo Petro con más de 11 millones de votos, bajo un plan de gobierno en el que la población viva “sin miedo”, “en dignidad” y con “garantías de derechos” para “vivir sabroso”.
Márquez Mina nació en el municipio de Suárez, del departamento de Cauca, en 1981 y es hija de una partera y de un minero y obrero. Su infancia no fue sencilla, ya que se hizo madre a los 16 años y debió trabajar en las minas de oro y como empleada doméstica.
Como líder social y ambiental sus primeros pasos se dieron a los 13 años, cuando hizo parte del proceso de evaluación de los impactos que generaría en su comunidad la desviación del río Ovejas por parte de la represa Salvajina. En 2009 estuvo luchando por las comunidades afrodescendientes de Suárez, luego de que fueron desalojadas de sus territorios ancestrales y los terrenos entregados para explotación minera a multinacionales como Anglo Gold Ashanti. Esta pelea hizo que fuera amenazada de muerte por grupos paramilitares, pero ella decide estudiar derecho para continuar dando pelea en favor del cuidado del ambiente.
En 2014 encabezó una marcha desde Suárez hasta Bogotá para exigir la protección del gobierno en el cumplimiento de la sentencia de la Corte Constitucional sobre la protección de los territorios ancestrales. Recibió en 2018 el premio Goldman Environmental. En 2019 fue blanco de un atentado con granada. Para las elecciones de 2022, Márquez anunció su candidatura para la presidencia, con el apoyo del movimiento político Soy porque somos. Más adelante recibió el aval del Polo Democrático Alternativo, con el que inscribió su candidatura para participar en la consulta interpartidista del Pacto Histórico, donde obtuvo el segundo lugar.
Márquez se puso como retos disminuir el hambre en Colombia y crear el Ministerio de la Igualdad para garantizar los derechos de los más desprotegidos del país.