Kiev. Ucrania y Rusia se acusaron ayer mutuamente de bombardear una zona cercana a la central nuclear de Zaporiyia, la mayor de Europa. Uno de los ataques afectó a una línea de alta tensión, lo que llevó a desconectar un reactor, aunque no se detectó ninguna fuga radiactiva.
Ucrania acusó a Rusia de lanzar tres bombardeos cerca de un reactor de la central de Zaporiyia, región del sur del la nación eslava que está bajo control ruso desde marzo. Moscú atribuyó el ataque a “formaciones armadas” de Kiev, y llamó a la comunidad internacional a actuar contra el “terrorismo nuclear” del presidente ucranio, Volodymir Zelensky. La Organización Internacional de Energía Atómica advirtió el martes que la situación es “cada día más peligrosa en la central de Zaporiyia”, por lo que pidió a las partes beligerantes que permitan a sus expertos inspeccionar las instalaciones.
Cinco días después de la salida del primer buque con granos de Ucrania desde el inicio de la invasión rusa, otros tres cargamentos zarparon ayer, con lo que comienza una serie de rotaciones regulares para abastecer los mercados agrícolas, anunció el Ministerio de Defensa turco.
La reanudación de las exportaciones de alimentos ucranios y rusos por vía marítima se logró gracias a un acuerdo con la mediación de Turquía y Naciones Unidas, para que Rusia levante el bloqueo de puertos de Ucrania a fin de aliviar la crisis alimentaria mundial, agregó la dependencia.
El presidente ruso, Vladimir Putin, agradeció a su par turco, Recep Tayyip Erdogan, dicha mediación en una cumbre celebrada ayer en la ciudad rusa de Sochi, en la que acordaron reforzar la cooperación energética y económica bilateral.
El viceprimer ministro ruso, Alexander Novak precisó que Putin y Erdogan se comprometieron a alcanzar 100 mil millones de dólares en intercambios comerciales, que incluyen incrementar la colaboración en transporte, agricultura, industria, finanzas, turismo y construcción.
Los presidentes reiteraron su intención de mantener las condiciones para que continúe la exportación de los productos alimentarios rusos y permitir la salida de los granos ucranios por los puertos del mar Negro.
De manera paralela, Putin promulgó un nuevo paquete de medidas para paliar las consecuencias de las sanciones económicas de Estados Unidos y la Unión Europea en los sectores financiero y energético.
El texto, publicado en el portal oficial del gobierno, impone restricciones a las entidades de los países hostiles para realizar transacciones con los títulos de valor, participaciones en empresas y cuentas hasta fin de año.
Putin pidió también a su gobierno y al Banco Central ruso presentar en un plazo de 10 días una lista de las compañías del sector energético y bancos con participación extranjera a las que se aplicarán las medidas.
Estados Unidos y la Unión Europea impusieron fuertes restricciones contra compañías de Rusia en distintos sectores, especialmente el energético y financiero, tras la invasión a Ucrania del pasado 24 de febrero.