Indianápolis. La Cámara de Representantes de Indiana votó ayer a favor de prohibir casi todos los abortos en el estado, y envió la legislación de vuelta al Senado estatal para consultar algunos cambios.

Los miembros del congreso estatal avanzaron la prohibición casi total del aborto 62-38 con excepciones limitadas, como los casos de violación e incesto y para proteger la vida y la salud física de la madre.

Si el Senado aprueba el proyecto de ley tal como está, los legisladores de Indiana se convertirán en los primeros en la nación en aprobar una nueva legislación que restringe el acceso al aborto desde el fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos del pasado 24 de junio que abre el camino para que cada estado decida si permite o prohíbe el aborto en una sentencia aplaudida por los republicanos y criticada por los demócratas.

La medida iría entonces al gobernador republicano Eric Holcomb, quien no ha indicado si la firmará.

La representante republicana Wendy McNamara de Evansville, quien patrocinó el proyecto de ley, declaró a los periodistas después de la votación que la legislación “hace de Indiana uno de los estados más provida de la nación”.

Afuera de la Cámara de Representantes, activistas por el derecho al aborto a menudo cantaban sobre los comentarios de los legisladores, con carteles como “Roe roe roe tu voto” y “Construye este muro” entre la iglesia y el estado. Algunos demócratas usaron blazers sobre camisetas rosas que decían: “Prohibiciones de nuestros cuerpos”.

Las excepciones para proteger la salud y la vida de la madre se agregaron tras repetidas solici-tudes de médicos. Asimismo, se permitirá cuando a un feto se le diagnostique una anomalía letal.

En tanto, la vicepresidenta Kamala Harris se reunió ayer con congresistas estatales latinas para defender el derecho al aborto, convertido en un tema de campaña para las legislativas de noviembre desde que la Corte Suprema anuló la protección federal que lo blindaba.

Harris agradeció a las congresistas latinas “un trabajo extraordinario en la primera línea” de la lucha por el derecho al aborto, en comentarios previos a la mesa redonda, que transcurrió a puerta cerrada.

Se trata, afirmó, de “aprender sobre el trabajo que se está realizando sobre el terreno, pero también promover nuestro objetivo de garantizar que ninguna mujer se sienta sola o ignorada en nuestro país sobre este asunto”.

Añadió que “el gobierno no debería tomar estas decisiones por las mujeres” porque “son lo suficientemente inteligentes como para hacerlo, tienen albedrío”.