A unas semanas del primer aniversario del programa Gas Bienestar, el presidente Andrés Manuel López Obrador destacó que con la política de precios máximos se logró el objetivo de controlar el costo del energético.

Aunque la estrategia “ya demostró que funciona”, reconoció: “Pemex tenía ya todo el plan, pero se nos vino esta nueva crisis y frenamos un poco ese programa, porque se controló el precio, que era el principal objetivo, pero ahí está el programa, sólo es cosa de ir ampliándolo”.

En su conferencia de prensa matutina, se le preguntó por las zonas y rutas de cobertura, así como la cantidad de cilindros diarios que son distribuidos, los cuales están por debajo de las metas esperadas. Admitió que dicho balance es cierto: “tenemos claro que debemos ir avanzando, y lo vamos a hacer hasta donde podamos”.

De igual forma, dijo, “deben venir otros (a continuar), porque era mucho el atraso, se habían dedicado sólo a robar; el gobierno era un facilitador para hacer negocios, para sacar provecho en lo personal, no para atender las necesidades del pueblo”.

También destacó otras medidas de su administración para controlar los precios y la inflación, como el subsidio a la gasolina y el diésel. Sobre esto último, señaló que “va a costar 500 mil millones de pesos, pero el secretario de Hacienda ya explicó: si no actuáramos así, tendríamos una inflación de 11 o 12 por ciento, y eso sí afecta muchísimo, porque puede provocar una crisis de consumo, caída en las ventas de básicos, menos recaudación y, desde luego, más carestía y aumento en el pago de las hipotecas”.

Si hacemos cuentas, apuntó, un economista podría explicar que esto ha evitado el aumento de dos o tres puntos de inflación.

“Estoy seguro de que nos conviene. Además, podemos hacerlo sin endeudar al país, porque afortunadamente estamos vendiendo petróleo crudo; ya no en la misma cantidad que antes, pero vendemos entre 800 y 900 mil barriles diarios, a un valor superior a 90 dólares en los últimos tres o cuatro meses”. Adujo que a los tecnócratas les cuesta mucho aplicar esto: “no lo aprendieron en la escuela”.

Confió en que la estrategia genere en breve reducción de la inflación, al mismo tiempo que subrayó la importancia de priorizar la producción como motor de progreso.