“Lo que quiero con toda mi alma es que rescatemos a los mineros”, remarcó el presidente Andrés Manuel López Obrador, y llamó a no perder la esperanza de poder salvar con vida a los trabajadores atrapados en la mina de carbón siniestrada el miércoles en Sabinas, Coahuila. Enfatizó que esto es la prioridad, incluso antes de dar a conocer las fallas, responsables y quién administraba la mina donde se dio una inundación dejando atrapados a 10 mineros.
“Las investigaciones sobre los responsables, los permisos, las inspecciones, todo eso lo estamos dejando para después, ya tenemos la información básica, ya sabemos quiénes tienen las minas, quiénes las explotaban, quiénes vendían el carbón, todo; pero no hablemos de eso ahora, vamos a buscar salvar a los mineros, a rescatarlos”, señaló el mandatario para cerrar la mañanera de ayer.
Detalló que desde el miércoles la Secretaría de la Defensa Nacional aplica el Plan DN-III-E a fin de atender la emergencia, con la participación de 230 elementos castrenses, de la Guardia Nacional y especialistas en el lugar del siniestro.
Pidió a los directores generales de la Comisión Nacional del Agua, Germán Martínez; de Petróleos Mexicanos, Octavio Romero Oropeza; de la Comisión Nacional de Electricidad, Manuel Bartlett; a la a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y a los gobernadores de la región ponerse de acuerdo con el general Agustín Radilla, subsecretario de la Defensa, quien está a cargo del rescate, para el envío bombas que permitan sacar el agua de las fosas.
Aseguró que las autoridades federales trabajan de manera coordinada con el gobierno de Coahuila y con las administraciones de municipios aledaños a la mina a fin de rescatar con vida a los trabajadores atrapados.
“Mandarle un abrazo a los familiares, no hay que perder la fe, no hay que perder la esperanza, un abrazo muy fuerte y van a seguir contando como siempre con nosotros, no están solos”, apuntó.
La Sedena informó que 30 elementos del equipo de respuesta inmediata y desastre, con cuatro binomios canófilos, así como seis buzos de fuerzas especiales, ya están en Sabinas para que una vez que existan las condiciones puedan entrar para rescatar a los mineros, que quedaron atrapados en la mina de 60 metros de profundidad.
El general Radilla indicó que los trabajadores laboraban en uno de tres pozos y, como estaba en desuso, hubo un derrumbe, lo que generó una inundación en los tres fosos, que se calcula es de 34 metros.
Además de los efectivos que trabajan en la zona, se cuenta con 17 vehículos, 12 ambulancias urbanas y 12 aeronaves; la CFE instaló plantas de luz en puntos estratégicos para acceder a las minas, y la Conagua aportó siete bombas de extracción de agua para lograr el rescate.
La coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez Alzúa, se conectó a la conferencia mañanera por videollamada para dar los detalles de las primeras jornadas en las labores de rescate. Recalcó que “el tiempo es muy importante así que estamos muy concentrados haciendo la tarea que nos corresponde”.
Precisó que se han tenido reuniones con las familias de los mineros que están atrapados y se les brinda atención sicológica. “Es nuestra obligación atenderlos y hablarles con la verdad”; además, que cinco mineros lograron salir y recibieron atención médica. Hasta el momento de la mañanera, dos habían sido dados de alta y tres recibían atención médica en una clínica del IMSS cercana a Sabinas.