El precio de la mezcla mexicana de exportación concluyó la semana con una pérdida de 13.97 dólares el barril, una caída de 14 por ciento, en un mercado que teme una recesión y con ello menor demanda de combustible.

Este viernes el barril de crudo mexicano recuperó 34 centavos respecto a la sesión del jueves y concluyó en 84.54 dólares por barril, de acuerdo con el precio reportado por Petróleos Mexicanos. No obstante, registró en la semana una fuerte baja, en línea con el comportamiento de los referentes internacionales.

Las cotizaciones del petróleo terminaron al alza en la sesión, gracias a los sólidos datos de crecimiento del empleo en Estados Unidos, pero cerraron la semana en sus niveles más bajos desde febrero, previo a la invasión de Rusia a Ucrania, por preocupaciones sobre una recesión que amenaza con afectar la demanda de combustible.

El Brent subió 80 centavos a 94.92 dólares el barril, 11 por ciento menos que al cierre del viernes pasado. El estadunidense West Texas Intermediate (WTI) sumó 47 centavos a 89.01 dólares el barril, un declive de 8 por ciento en la semana.

Los operadores de petróleo se mostraron preocupados esta semana por la inflación, el crecimiento económico y la demanda, pero las señales de escasez de oferta mantuvieron un piso bajo los precios.

El número de plataformas petroleras activas en Estados Unidos, un indicador anticipado de la producción futura, cayó en siete a 598 en la semana hasta el 5 de agosto, la primera disminución en 10 semanas, indicó la firma de servicios energéticos Baker Hughes en su informe del viernes.

Las preocupaciones por una recesión se han intensificado desde que el Banco de Inglaterra advirtió el jueves sobre una recesión prolongada después de que elevó las tasas de interés al máximo desde 1995.

“Claramente, todo el mundo se está tomando la amenaza de la recesión mucho más en serio, ya que seguimos viendo un mercado muy ajustado y a los productores sin capacidad para cambiar eso”, comentó Craig Erlam, analista de mercado senior de Oanda en Londres.