Durante la emergencia sanitaria por covid-19 de 2020 se redujeron en más de la mitad las acciones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para prevenir embarazos no deseados. Lo mismo ocurrió con la cifra de mujeres que acudieron por primera vez a recibir algún anticonceptivo, que disminuyó 54 por ciento, afirmó el director del organismo, Zoé Robledo.

El funcionario asistió ayer a la presentación de los lineamientos técnicos para prescripción y uso de métodos anticonceptivos de la Secretaría de Salud. El acto se realizó en el Instituto Nacional de Perinatología y en el contexto del Día Mundial de la Planificación Familiar, que se conmemoró este 3 de agosto.

Robledo subrayó la importancia del nuevo documento para mejorar la cobertura de las alternativas de comprobada eficacia para que las personas elijan, con libertad, sobre su salud sexual y reproductiva. No obstante, identificó como reto que las disposiciones elaboradas por especialistas y organizaciones de la sociedad civil lleguen y se apliquen en todo el país.

Los nuevos lineamientos señalan que de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre la Dinámica Demográfica 2018, 11 por ciento de mujeres sexualmente activas no deseaban tener más hijos o querían posponer su próximo embarazo, pero carecían de acceso a algún contraceptivo.

También reconocen la necesidad de que el personal de salud cuente con conocimientos necesarios y esté “debidamente sensibilizado” para proporcionar información y servicios de calidad en materia de anticoncepción y planificación familiar.

Esto forma parte de una añeja demanda de las organizaciones civiles, pues las personas, particularmente adolescentes, han enfrentado dificultades cuando deciden acercarse a los servicios de salud sexual y reproductiva, pues se enfrentan al maltrato y menosprecio de médicos y enfermeros.

Los lineamientos advierten que si bien en México ha habido avances importantes para mejorar la salud sexual y reproductiva de las mujeres y disminuir la mortalidad materna, persisten grandes retos para hacer efectivo el derecho de las personas a decidir si desean ejercer la maternidad o la paternidad, en qué momento y con qué frecuencia.

El documento ofrece información amplia y detallada sobre cada uno de los métodos anticonceptivos temporales: hormonales, dispositivos intrauterinos, de barrera (condón, espermicida), la anticoncepción de emergencia y los que se basan en el conocimiento de la fertilidad por síntomas, temperatura y ovulación. Un capítulo está dedicado a los permanentes: oclusión tubaria bilateral y vasectomía.

Resalta que el objetivo es que con información clara, sencilla y veraz, los usuarios elijan el método que mejor se adapte a sus necesidades y preferencias reproductivas.