Durante la pandemia de covid-19, el sobrepeso y obesidad en adolescentes se aceleró, al pasar de 38.4 a 43.8 por ciento entre 2018 y 2021, lo cual corresponde con el hecho de que 92 por ciento de ese sector de la población consume más bebidas endulzadas, indican los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2021.

Un fenómeno similar se registró entre los niños de cinco a 11 años, donde el exceso de peso corporal subió de 35.5 a 38.2 por ciento durante el mismo periodo. Este es un problema identificado en las diferentes encuestas desde 1999, cuando poco menos de un tercio de ambos grupos de edad reportaban sobrepeso y obesidad.

En los siguientes años continuó en aumento y colocó a México en el primer lugar del mundo con la mayor cantidad de niños con este problema de salud.

En tanto, 72.4 por ciento de las personas mayores de 20 años viven con sobrepeso y obesidad, comentó Eduardo Lazcano, director del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), durante la presentación de los datos de la Ensanut 2021, la cual se realiza cada año, con la finaldiad de que en los siguientes dos se cuente con información nacional sobre los diferentes aspectos de la salud de las personas.

Respecto a la situación de niños y adolescentes, la encuesta advierte que el mayor peso corporal está relacionado con el tiempo que pasan frente a una pantalla, el sedentarismo, la inseguridad alimentaria y otros determinantes ocasionados por la pandemia.

En las entrevistas se identificó que existe un bajo consumo de frutas, verduras y leguminosa, menos de 40 por ciento, en la población escolar. Esos alimentos son fuente de fibra dietética y nutrientes antioxidantes. En contraparte, se observó una tendencia creciente en la ingesta de productos no recomendables.

En los adolescentes se observó que existe un patrón de consumo alto en bebidas endulzadas y alimentos con elevado contenido de harinas refinadas, azúcar o sodio.

Sobre la prevalencia de enfermedades crónicas en personas de 20 años y más, la Ensanut halló que la diabetes es 15.8 por ciento, pero 36 por ciento de los afectados desconoce que la tiene. La proporción es mayor en los individuos de menos de 40 años, pues 61 por ciento no sabe que padece la alteración metabólica.

En este grupo la prevalencia es de 5.7 por ciento y aumenta a 19.9 por ciento en el rango de 40 a 59 años y a 31.2 por ciento, en el caso de los adultos con 60 y más.

De hipertensión arterial, se identificó que 28.2 por ciento de la población vive con este padecimiento. Niveles elevados del colesterol se encontraron en 32.1 por ciento de los adultos y de triglicéridos, en 47.2 por ciento.