Washington. El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, indicó ayer que sostuvo una “conversación franca” por teléfono con el canciller de Rusia, Serguéi Lavrov, por primera vez desde el comienzo de la guerra en Ucrania, en la que exhortó a aceptar la oferta de Washington para liberar a dos estadunidenses presos en Rusia: la estrella del basquetbol femenil Brittney Griner y al ciudadano Paul Whelan.
Sobre el intercambio, Lavrov “sugirió encarecidamente” a Blinken “regresar a un diálogo profesional en el modo de la diplomacia tranquila”, sin especulaciones mediáticas ni filtraciones, sobre cualquier intento de liberación de los estadunidenses detenidos, informó la cancillería rusa en un comunicado.
Las autoridades rusas no revelaron si Blinken había logrado algún progreso en el caso, y más tarde emitieron un comunicado de reproche instando a Estados Unidos a buscar la libertad de los estadunidenses a través de una “diplomacia tranquila”.
En rueda de prensa, Blinken señaló: “Tuvimos una conversación franca y directa. Presioné al Kremlin para que aceptara la propuesta sustancial que presentamos”, respecto a los presos estadunidenses.
Por oto lado, el presidente ucranio, Volodymir Zelensky, calificó de “crimen de guerra ruso deliberado” el ataque a la prisión de Donietsk. El mandatario visitó Odesa y Chernomorsk, dos de los principales puertos en el sur de Ucrania, para demostrar que su país se prepara para empezar con las exportaciones de grano, una semana después del acuerdo firmado hace una semana con Rusia, la Organización de Naciones Unidas (ONU) y Turquía; aseguró que Kiev espera una señal para el primer envío.
“Está en curso el cargamento del primer barco desde el inicio de la guerra. Se trata de un buque turco”, dijo, acompañado de representantes del Grupo de los 7, Turquía y la ONU, y aseguró que 10 barcos cargados con cereal están listos para zarpar.