La decisión del gobierno federal de subsidiar el precio de los combustibles provocó que en primer semestre del año la recaudación del impuesto a las gasolinas y el diésel arrojara una pérdida para el fisco de 22 mil 55 millones de pesos, cuando en el mismo periodo del año pasado se había logrado una captación de 134 mil 597 millones de pesos, de acuerdo con datos divulgados ayer por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
En la conferencia para presentar el informe trimestral de las finanzas públicas de abril-junio, Gabriel Yorio González, subsecretario de Hacienda, dijo a La Jornada que los apoyos fiscales a los combustibles “no tienen ningún impacto en el presupuesto aprobado por el Congreso”, el cual autorizó un precio de 55 dólares por barril.
Indicó que la mezcla está ahora en 93 dólares por barril, lo que permite tener excedentes que se usan para pagar el subsidio.
“No va haber recortes asociados a esta pérdida del IEPS y con esto podemos cerrar el año fiscal manteniendo el nivel de gasto que aprobó el Congreso y con un nivel de ingresos ligeramente mayor”, dijo.
En junio, la Federación perdió 31 mil 484 millones de pesos por subvenciones en el IEPS, que se comparan con un ingreso de 21 mil 557 millones en el sexto mes del año pasado.
En enero-junio los ingresos totales por IEPS fueron de 74 mil 917 millones de pesos, monto que significó una caída de 68.5 por ciento respecto a igual lapso del año pasado.
Yorio Gonzalez comentó que la baja se compensa por mayores ingresos petroleros y mayor recaudación de impuestos al valor agregado (IVA) y sobre la renta (ISR), relacionados a la actividad económica.
El total de ingresos en la primera mitad del año ascendió a 3 billones 305 mil millones de pesos, monto superior en 159 mil 437 millones frente a lo programado, 4.9 por ciento real frente a igual periodo de 2021.
Los petroleros ascendieron a 594 mil 193 millones de pesos, dato que significó más de 53 mil 441 millones de pesos frente a lo presupuestado o 29.4 por ciento más respecto del primer semestre del año pasado.
Los ingresos no petroleros sumaron 2 billones 710 mil millones de pesos, 105 mil 995 millones de pesos más de lo programado, 0.7 por ciento extra frente a enero-junio de un año atrás.
Los ingresos tributarios ascendieron a 2 billones 49 mil millones de pesos, un aumento de 2.7 por ciento.
Por IVA se obtuvieron 621 mil 549 millones de pesos, un avance de 3.4 por ciento, mientras por ISR un billón 256 mil millones de pesos, un aumento de 16.2 por ciento real.
El gasto neto total del sector público se ubicó en 3 billones 508 mil 802 millones de pesos, lo que representó un crecimiento real anual de 2.1 por ciento respecto al primer semestre de 2021.
Aunque el gasto de la Secretaría de Energía estaba programado en el primer semestre del año en 46 mil 162 millones, obtuvo 45 mil 953 extra por la construcción de la refinería Olmeca y terminó en 92 mil 115 millones al cierre de la primera mitad del año.
Turismo gastó 52 mil 212 millones de pesos en el primer semestre, que significaron 20 mil 901 millones más que lo programado y frente a igual periodo del año pasado fue 260.1 por ciento más.
Educación gastó 158 mil 973 millones, monto inferior en 24 mil 926 millones frente a lo programado, 17.9 por ciento menos respecto a la primera mitad de 2021.
Salud erogó 66 mil 970 millones de pesos, monto 16 mil 46 millones de pesos menor a lo programado, 6.4 por ciento en comparación con enero-junio del año pasado.
El saldo histórico de los requerimientos financieros del sector público, la medida más amplia del saldo de la deuda, ascendió a 13 billones 249 mil 507 millones de pesos, equivalente a 45.7 por ciento del producto interno bruto.
Yorio González señaló que el Paquete Contra la Inflación y la Carestía sí está funcionando e incluso se busca que otros sectores se unan.