La Secretaría de Salud (Ssa) dejó de emitir el semáforo de riesgo epidémico de covid-19 a partir de mayo pasado cuando la transmisión del virus se encontraba en los niveles más bajos. Había menos de 300 personas hospitalizadas y el porcentaje de pruebas con resultado positivo al coronavirus era de 15 por ciento.

El pasado lunes había mil 885 enfermos en los nosocomios, cifra también menor con respecto a las que se reportaron en la cuarta ola (enero 2022), con más de 9 mil pacientes internados.

Actualmente, aunque la curva epidémica de la quinta ola ya refleja un ligero descenso, la cantidad de casos confirmados sigue siendo alta. El reporte de ayer de la Ssa indicó que se tuvieron los resultados de pruebas de laboratorio para 30 mil 497 personas con covid-19 y 152 que fallecieron por complicaciones graves de la infección.

Así, el Sistema de Vigilancia de Enfermedad Respiratoria (Sisver) tiene un registro acumulado de 6 millones 659 mil 38 casos y 327 mil 261 defunciones.

Los casos activos estimados eran 190 mil 962 y las entidades con más personas que iniciaron con síntomas en los pasados 14 días, por 100 mil habitantes, son Ciudad de México, Colima, Baja California Sur, San Luis Potosí, Querétaro, Tlaxcala, Coahuila, Sinaloa, Nuevo León y Tabasco.

Hace dos meses, la Ssa también consideró que se iniciaba el tránsito de pandemia a endemia, es decir, la permanencia del virus en el territorio, con brotes en determinadas épocas del año. Especialistas han señalado que aunque esa sería la situación “normal” para los virus, el SARS-CoV-2 ha tenido un comportamiento diferente, por lo que es más complicado realizar cualquier pronóstico.

Lo evidente, hasta ahora, es que aunque han surgido variantes y subvariantes, en particular de ómicron, que es la más reciente, las cuales han tenido una mayor capacidad de transmisión, el impacto en enfermedad grave y muerte ha sido menor con respecto a las olas de contagio anteriores por efecto de las medidas de prevención y en particular por la cobertura de vacunación.

En cuanto a la ocupación hospitalaria, el promedio nacional es de 18 por ciento para camas generales y 5 por ciento en las que tienen ventilador. No obstante, ayer había 17 estados con más enfermos internados en camas generales. Entre otros, eran Guerrero, con 65 por ciento; Aguascalientes, 53; Durango, 49; Chihuahua, 47, y Ciudad de México, 33 por ciento.

En las camas con ventilador las entidades con porcentajes mayores eran Oaxaca, con 17 por ciento; Nuevo León, 10; Aguascalientes, 7; Chihuahua, Veracruz y Ciudad de México, 6 por ciento cada uno.