Uvalde. Nuevas imágenes de las cámaras corporales que portaban los primeros agentes que acudieron al tiroteo en la primaria Robb, en Uvalde, Texas, muestran a los policías rompiendo ventanas y sacando a niños de la escuela. También el momento en que en un pasillo buscan entre un manojo de llaves para abrir, sin éxito, una puerta cerca de donde el atacante había tomado el control de dos aulas llenas de estudiantes y maestras muertos, heridos y aterrorizados, informó ayer CNN.
A diferencia de las imágenes anteriores de la matanza que publicó el diario Austin American Statesman este mes, el nuevo video muestra primeros planos afuera de los salones de clase 111 y 112. Además, revela conversaciones entre los agentes y súplicas al atacante.
El video lo entregó primero a CNN el alcalde de Uvalde, Don McLaughlin. El mes pasado, el funcionario expresó lo frustrado que estaba con la investigación sobre la respuesta al tiroteo que cobró la vida de 19 niños, de entre 9 y 11 años, y de dos profesoras.
McLaughlin informó que divulgó las imágenes a pesar de las instrucciones de la oficina de la fiscal de distrito, Christina Mitchell Busbee, quien dirige la investigación acerca de la respuesta policial.
CNN confirmó que a las familias de las víctimas se les ofreció la oportunidad de ver los videos, quienes han criticado la cantidad de tiempo que tardaron las autoridades en detener al atacante: 77 minutos desde que los agentes ingresaron por primera vez a la escuela. Eso, a pesar de que el entrenamiento consistía en confrontar a un agresor para “detener la masacre”.
En tanto, el Departamento de Seguridad Pública (DPS) de Texas, anunció ayer una investigación interna sobre la respuesta tardía a la masacre.
La pesquisa se ordena un día después de que la Cámara de Representantes del estado dio a conocer un reporte de 80 páginas en el cual se revelaron fallas en todos los niveles de la policía. Los hallazgos indican que había más de 90 agentes estatales presentes en la primaria Robb durante el ataque del 24 de mayo.
Es la primera vez que el DPS de Texas dice que examinará las acciones de sus propios elementos en los dos meses que han trascurrido desde el tiroteo escolar con mayor número de muertes en la historia de Texas.
El DSP señaló en un comunicado que la revisión “determinaría si ocurrieron violaciones a las políticas, leyes o doctrinas” durante la caótica respuesta al ataque. Añadió que la evaluación inició la semana pasada.
El director de la agencia, Steve McCraw, se había referido previamente a la respuesta policial a la masacre como un “rotundo fracaso”. Atribuyó buena parte de la culpa al jefe de policía del distrito escolar por no irrumpir antes en el aula.
Los hallazgos de una comisión investigadora dados a conocer el domingo fueron los primeros en criticar tanto a la policía estatal como a la federal, y no sólo a las autoridades locales de la ciudad del sur de Texas, por la desconcertante falta de acción de agentes fuertemente armados mientras el agresor disparaba dentro de dos aulas de cuarto grado.
Las imágenes de las cámaras corporales de los policías de la ciudad, las cuales fueron dadas a conocer horas después, únicamente enfatizaron las fallas y avivaron el enojo y la frustración de los familiares de las víctimas.