Xalapa, Ver., Tras la inauguración de la planta Nestlé por el presidente Andrés Manuel López Obrador este fin de semana en Veracruz, productores consultados por La Jornada consideraron que la puesta en operación de esta fábrica desplazará el cultivo de la variedad arábiga por el de robusta –de menor calidad–, promoverá el consumo de cafés de mala calidad entre los mexicanos, y será una competencia para los cafetaleros.
Fernando Celis Callejas, asesor general de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras, dijo que México es productor de café arábigo, que se cotiza hasta en 250 dólares en el mercado, mientras Nestlé utiliza café robusta, que tiene un costo de 70 dólares.
Además, dijo que si bien tiene planteado comprar café robusta cultivado en México, por las cantidades de procesamiento anunciadas, es posible que Nestlé importe esta variedad de otras partes, como Brasil.
Para Celis Callejas la introducción de café de baja calidad y de menor precio al país derivará en el abaratamiento del de buena calidad, como es el arábigo, que producen los caficultores mexicanos.
Por su parte, Cirilo Elotlán Díaz, integrante del Consejo Regional del Café de Coatepec, señaló que la trasnacional no promueve el consumo de buen café que producen los cafeticultores mexicanos.
“A Nestlé no le interesa la variedad arábiga, sino robusta para hacer sus solubles. Ellos a través de la mercadotecnia lo hacen pasar como de alta calidad frente a los consumidores”.
Elotlán Díaz se quejó del trato preferencial que recibe Nestlé, pues mientras representantes de la trasnacional fueron recibidos por el Presidente a los pocos días de asumir el cargo, los sectores cafetaleros no han sido escuchados por el Ejecutivo federal.
“Lo primero que hicieron fue desarticular las organizaciones, y favorecer el individualismo; se dijo que primero los pobres, pero se apoya a las trasnacionales”, recriminó.
El líder cafetalero puntualizó que mientras a Nestlé la apoyan con programas como Jóvenes Construyendo el Futuro para que trabajen en su planta, y Sembrando vida, para productores que cultivan café robusta para la planta, el resto de caficultores enfrentan las plagas como la roya y el alza de fertilizantes sin apoyos.