Palaiochori. Un avión de carga ucranio, que transportaba más de 11 toneladas de municiones de mortero se estrelló antenoche cerca de la norteña ciudad griega de Kavala, anunció ayer el ministro de Defensa serbio, Nebojsa Stefanovic. Los ocho tripulantes murieron.
Un grupo de expertos investigaba ayer los restos de un avión de carga que se desplomó, sin encontrar evidencia de sustancias peligrosas, aunque sí dijeron que gran cantidad de material de guerra que transportaba quedó desperdigado.
La tripulación ucrania volaba el avión An-12 de Serbia antes de estrellarse en campos agrícolas entre dos poblados griegos el sábado por la noche. La aeronave chocó a unos 40 kilómetros al oeste del Aeropuerto Internacional de Kavala.
Minutos antes, el piloto informó a los controladores de tráfico aéreo que tenía problemas con un motor y necesitaba aterrizar de emergencia, indicaron funcionarios. Se le instruyó que se dirigiera al aeropuerto de Kavala, pero nunca llegó. El fuselaje de la aeronave de la era soviética, con cuatro motores de turbohélice, se arrastró sobre el terreno 170 metros antes de desintegrarse. Los residentes reportaron haber visto una bola de fuego y escuchar explosiones durante dos horas después del choque. Imágenes de drones mostraron que el avión quedó en fragmentos.
El ministro de Defensa de Serbia, Nebojsa Stefanovic, dijo que la aeronave transportaba 11.5 toneladas de municiones de mortero de fabricación serbia a Bangladesh, que las adquirió. Despegó de la ciudad serbia de Nis e iba a hacer una escala en Amán, Jordania.
“Se trataba de minas de mortero con iluminación y de entrenamiento... Este vuelo contaba con todos los permisos según las regulaciones internacionales”, dijo Stefanovic. El avión era operado por la aerolínea de carga ucrania Meridian. El cónsul de Kiev en Salónica, quien llegó al lugar del accidente, dijo a las autoridades locales que todos los miembros de la tripulación eran ucranios.
La Unidad Especial Conjunta de Defensa Nuclear, Biológica y Química del ejército griego despejó el domingo dos senderos para que expertos forenses del Departamento de Incendios tuvieran acceso. Hacia la puesta del sol, el segundo equipo había recuperado todos los cuerpos, señaló el comandante del Batallón de Retiro de Minas Terrestres.
A los residentes se les permitió salir de sus casas ayer después de que el sábado por la noche se les pidió que permanecieran en interiores y con las ventanas cerradas.