La crisis energética a nivel mundial rebasó al plan del gobierno federal para invertir y poner en pleno funcionamiento las plantas de urea, fosfatados y nitrogenados que se compraron a sobreprecio durante la administración del presidente Enrique Peña Nieto. El año pasado, las filiales de Pemex Transformación Industrial (PTRI) enfocadas al sector de fertilizantes representaron pérdidas por 3 mil 444 millones de pesos para la empresa productiva del Estado.
A los sobrecostos en la adquisición de infraestructura se suman las pérdidas contables, las inversiones por 300 millones de dólares que el gobierno planea para rehabilitar las plantas de fertilizantes, así como las eventuales sanciones económicas contra PTRI, dadas las denuncias por incumplimiento de contrato impuestas por Odebrecht y Tech Man Group, muestran documentos de la cuenta pública 2021 integrada por la Secretaría de Hacienda.
En marzo de 2022, el director de Pemex, Octavio Oropeza, anunció que la inversión —sólo en las plantas de fertilizantes, sin contar suministro o su adquisición al extranjero— será de 300 millones de dólares entre este y los próximos dos años.
Este domingo, en Veracruz, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que se invertirán 500 millones de dólares para aumentar la producción y garantizar el suministro gratuito de estos insumos a campesinos, ejidatarios y pequeños productores. Dicha suma incluye la rehabilitación de las plantas.
El año pasado Pemex Fertilizantes –la subsidiaria a través de la cual el gobierno de Peña Nieto adquirió plantas para reducir la importación de abonos químicos– fue absorbida por PTRI; así lo resolvió el Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos (Pemex) el 2 de diciembre de 2020 y con ello se fusionaron los recursos humanos, materiales, financieros; así como los bienes, derechos y obligaciones de ambas empresas.
Pemex Fertilizantes ya arrastraba pérdidas por las cuestionadas compras de Fertinal (ahora Fertilizantes Pacífico) y Agronitrogenados (Pro-Agroindustria), lo que implicó a PTRI absorber un pasivo patrimonial de 7 mil 77 millones de pesos. Se suma que el año pasado Fertilizantes Holding representó una pérdida de 2 mil millones de pesos para la subsidiaria, mientras Fertilizantes Pacífico agregó un quebranto de mil 444 millones de pesos, muestra la cuenta pública 2021.
Las obligaciones en lo que antes era Pemex Fertilizantes sólo son una parte de las presiones apiladas sobre Transformación Industrial, la cual tuvo una pérdida de 193 mil 83 millones de pesos el año pasado y sobre la cual, KMPG, el auditor independiente de sus estados financieros, apunta que existe la “incertidumbre material” para creer que pueda continuar como negocio en marcha.
Hasta hace un par de años, la compra de Agronitrogenados y Fertinal eran parte de los diversos casos de dinero malgastado, incluso de corrupción, que documenta la Auditoría Superior de la Federación. En la coyuntura actual, representan recursos que no llegan a tiempo para contener el efecto de la crisis a nivel mundial y que tiene en el suministro de fertilizantes una de sus principales características.
Datos del Banco Mundial exhiben que los fertilizantes se han encarecido en promedio 34 por ciento en lo que va de 2022 y 75.6 respecto a junio del año pasado, en el marco del conflicto entre Rusia y Ucrania, importantes proveedores de petroquímicos y granos.
En la única planta que la cuenta pública 2021 reporta resultados, Cosoleacaque, la fabricación de fertilizantes se encuentra por debajo de lo previsto en el Programa Operativo y Financiero Anual de Trabajo de la empresa productiva mexicana. La producción de amoniaco se quedó 19.2 por ciento por debajo, y la de anhídrido carbónico fue 7.6 por ciento mayor.