Hace un año Jaime Lozano festejaba como entrenador el haber conseguido la medalla de bronce con el Tricolor Sub-23 en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, pero ahora el estratega lamenta la complicada situación del futbol mexicano al haber quedado fuera del Mundial Sub-20 de Indonesia y de París 2024.
“De selección no me gustaría hablar. Sólo puedo decir que me duele que corten procesos, sobre todo cuando el Tricolor no estará en mundiales y Juegos Olímpicos”, dijo con aflicción tras el partido de Necaxa ante Pumas.
El ahora entrenador de los Rayos consideró que le atañe la situación que se vive en selecciones nacionales, pues fue parte de la estructura de la Federación Mexicana de Futbol y como estratega de la Liga Mx también debe formar jugadores de calidad.
“Me considero parte de ese proceso, aunque no esté ahí, tengo que ver. Soy parte de la Liga y me corresponde elevar mi nivel, mi preparación, para dar mejores jugadores a la selección y exigir mejores resultados”, agregó.
Lozano asumió en 2018 la dirección técnica de la Sub- 23 con rumbo a Tokio 2020.
Pese a la pandemia y tener que lidiar con el rechazo de algunos clubes para prestar a los jugadores, consiguió imponerse en el Preolímpico de Guadalajara al tiempo que obtuvo la segunda presea para México en el torneo de futbol en una justa veraniega.
Sin embargo, el entrenador decidió no continuar en selecciones nacionales y Luis Pérez tomó la dirección técnica del plantel Sub-20, la nueva generación que pelearía por el boleto a París 2024.
El resultado fue un descalabro mayúsculo, al ser eliminados en cuartos de final por Guatemala en el Premundial, privando a una generación de jugadores mexicanos de competir en el Mundial y en unos Juegos Olímpicos.
El golpe fue tan fuerte que la Federación Mexicana de Futbol destituyó a Gerardo Torrado, director general del organismo; a Ignacio Hierro de la dirección de selecciones nacionales y a Luis Pérez.