Bali. Los ministros de Finanzas occidentales condenaron este viernes la invasión rusa de Ucrania, durante su reunión del G20 en Indonesia, y responsabilizaron a Moscú del enorme impacto de la guerra en la economía mundial.
La cita de dos días, en la que participan también los presidentes de bancos centrales, se celebra en la isla de Bali a la sombra de la guerra que ha agitado los mercados, disparado los precios de los alimentos y la inflación.
Esta reunión dio lugar a nuevas confrontaciones, una semana después de que los ministros de Relaciones Exteriores del G20 lanzaran una salva de acusaciones al jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, por la invasión.
"Rusia es el único responsable de los efectos negativos en la economía mundial", dijo la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, a la delegación rusa en la sesión de apertura, según un funcionario.
"La guerra injustificada de Rusia contra Ucrania ha enviado una onda de choque a la economía mundial", agregó Yellen en una conferencia, al señalar que eso está llevando a que "más personas pasen hambre".
Una fuente en la delegación francesa dijo a la AFP que "ha habido una amplia denuncia de la guerra y de sus consecuencias", mientras que "Rusia intentó decir que la situación económica mundial no tenía ninguna relación" con la ofensiva rusa.
"Es la invasión de Rusia la que ha socavado la seguridad alimentaria y energética, no las sanciones, y Rusia debe asumir toda la responsabilidad", coincidió el ministro australiano de Economía, Jim Chalmers, según una declaración vista por AFP.
Por su parte, la ministra canadiense de Finanzas, Chrystia Freeland, con orígenes ucranianos, señaló a la delegación rusa que "no son solo los generales los que cometen crímenes de guerra", sino también "los tecnócratas económicos" que permiten que la guerra ocurra y continúe.
Los ministros de Finanzas ruso, Anton Siluanov, y ucraniano, Serhiy Marchenko, participarán virtualmente en la cita.
Rusia estuvo representada por el viceministro ruso de Finanzas, Timur Maksimov, y Elizaveta Danilova, funcionaria del banco central.
"El desafío más grande"
Indonesia, país anfitrión y presidente del G20 (grupo de potencias industrializadas y emergentes), advirtió a los ministros que el fracaso a la hora de abordar las crisis energética y alimentaria sería "catastrófico", sobre todo para los países de bajos ingresos.
La ministra de Finanzas de Indonesia, Sri Mulyani Indrawati, llamó a sus pares a trabajar unidos con un espíritu de "cooperación, colaboración y consenso" porque "el mundo está mirando" si llegan soluciones.
"Las acciones del presidente ruso (Vladimir) Putin, que incluyen la destrucción de instalaciones agrícolas, el robo de granos y equipos agrícolas, y el bloqueo efectivo de los puertos del mar Negro, equivale a usar alimentos como arma de guerra", dijo Yellen.
Yellen marcó calificó la guerra rusa en Ucrania como "el desafío más grande" de la economía mundial y dijo que miembros del gobierno de Putin no tienen cabida en las conversaciones.
Yellen ha insistido a sus aliados del G20 para que pongan un tope al precio del petróleo ruso y así ahogar las arcas del presidente ruso y presionar a Moscú para poner fin a la invasión, reduciendo los costos de la energía.
Es poco probable que haya una declaración final cuando concluya la reunión el sábado, debido a los desacuerdos sobre el papel de Rusia como causante de los problemas económicos mundiales.
"Actuar juntos"
Indonesia, con una política exterior neutra, ha evitado excluir a Rusia del foro pese a la presión occidental.
"Este no es un momento fácil dada la diversidad de nuestros miembros (…) y las diferencias de criterios", admitió Indrawati.
Sin embargo, llamó a "actuar juntos para demostrar por qué el G20 merece su reputación como el principal foro de cooperación internacional".
Además de los ministros de Rusia y Ucrania, el titular chino de Finanzas, Liu Kun, intervendrá de forma virtual, según la prensa estatal indonesia, así como el nuevo ministro británico, Nadhim Zahawi.
La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, estará presente, luego de que el miércoles advirtió que la perspectiva económica mundial "se oscureció significativamente" por la invasión rusa.
Igualmente, la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, intervendrá virtualmente, en tanto que el presidente del Banco Mundial, David Malpass, no participará.
La cita es un preludio a la cumbre que celebrarán los gobernantes del G20 en la isla indonesia en noviembre, que debía centrarse en la recuperación económica tras la pandemia del covid-19.
Pero el foco cambió tras la invasión rusa, que bloqueó los puertos de Ucrania, uno de los principales productores mundiales de alimentos.