La ciudad de Caborca, en el norte de Sonora, vivió ayer una nueva jornada de violencia entre bandas dedicadas al trafico de drogas en la frontera con Estados Unidos: tres hombres fueron ejecutados y seis secuestrados en hechos distintos; asimismo, varias viviendas fueron baleadas y dos incendiadas.

Con los de ayer suman al menos 21 asesinatos presuntamente vinculados con el crimen organizado en la localidad en una semana, según fuentes policiacas.

Elementos de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), perteneciente a la fiscalía estatal, activaron el “código rojo” e iniciaron la persecución de los pistoleros, a quienes dieron alcance justo frente a las instalaciones de la corporación, donde ocurrió el enfrentamiento.

En la refriega, uno de los presuntos delincuentes recibió tres disparos y minutos después llegó al hospital general de la localidad a solicitar atención; sus cómplices lograron escapar y en el sitio del tiroteo quedaron 60 casquillos percutidos.

Personal del nosocomio reportó a las autoridades el ingreso del lesionado, por lo que arribaron agentes policiacos, quienes tomaron declaración al sospechoso y lo trasladaron a otra clínica, donde es resguardado por efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional.

A primera hora de este miércoles, medios locales y colectivos de búsqueda de víctimas de desaparición forzada reportaron que cinco individuos fueron levantados por sujetos armados en las calles de Caborca.

Vecinos alertaron en redes sociales que varias viviendas de la colonia Aviación fueron baleadas y dos domicilios de la colonia Real de los Viñedos fueron incendiadas por los integrantes de un convoy. Los pobladores expresaron su enojo y preocupación por la inseguridad que prevalece en esta región.

En horas recientes, tres sujetos fueron ultimados en dos hechos distintos, según reportes de corporaciones locales. Dos fueron abatidos casi a la medianoche del martes y sus cuerpos hallados con las manos atadas y varios impactos de bala.

Más tarde, en otro punto de la demarcación, un hombre fue ejecutado cuando se encontraba en un automóvil.

Ayer por la tarde, un individuo fue privado de la libertad en la calle después de que pistoleros abrieron fuego contra el vehículo en que se trasladaba, el cual recibió cuatro balazos y se quedó con el motor encendido.

Minutos después, una trabajadora de la Base Operativa de la AMIC reportó un tiroteo fuera de esas instalaciones, por lo que elementos de distintas corporaciones resguardaron el inmueble.

El pasado 2 de julio, elementos del Ejército capturaron a Francisco Torres Carranza, El Duranguito, capo de una célula criminal que operaba en la frontera de Sonora con Estados Unidos. En respuesta, comandos de esa organización robaron tractocamiones de doble remolque y bloquearon la carretera federal México 2.

Cientos de automovilistas y transportistas quedaron varados. Ese mismo día, pero en otro sector, presuntos criminales se enfrentaron con fuerzas seguridad con saldo de dos muertos: un soldado y un agresor; asimismo, cuatro gatilleros fueron arrestados.

Capturan a El Comandante

Elementos de la Fiscalía General de la República (FGR) aprehendieron ayer a Benito Barrios Maldonado, El Comandante, quien era buscado por la Interpol por su probable responsabilidad en los delitos de asociación delictuosa y contra la salud.

Benito Barrios era elemento de la AMIC y es sobrino de Manuel Ángel Barrios Macario, quien hasta el 3 de mayo pasado fue director de dicha instancia, en la que laboró 30 años.

La captura tuvo lugar ayer en la comunidad de Estación Pesqueira, municipio de San Miguel Horcasitas, a unos 60 kilómetros de la capital, Hermosillo. Presuntamente, Barrios Maldonado pertenece a uno de los grupos criminales dedicados al tráfico de drogas hacia Estados Unidos.

La FGR detalló que El Comandante es requerido por un juez de distrito penal con sede en el Reclusorio Oriente, en la Ciudad de México. Fue trasladado a la delegación de esa institución federal en la capital sonorense.