En México, 12 periodistas han sido asesinadas y muchas más fueron atacadas en los recientes 15 años, tres de ellas en lo que va del año, de acuerdo con información de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

Lo anterior demuestra el peligro de desempeñar la profesión en el país, señaló Irene Khan, relatora especial de Naciones Unidas sobre la Promoción y Protección de la Libertad de Expresión. “En el informe que presenté recientemente al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, uno de los mensajes claves es que la libertad de prensa está en picada en todo el mundo, pero en México, tristemente, se encuentra hasta arriba de dicha lista. Este año, 10 periodistas han sido asesinados en México, en Ucrania 12; sin embargo, en el país europeo hay un conflicto armado”.

Al participar en el conversatorio La violencia contra las periodistas en México, que organizó el Instituto Mexicano de las Mujeres, Khan señaló que “financiar a los periodistas es una forma grave de censura y matarlos es la peor; cuando el Estado falla en investigar y abrir procesos legales en contra de los asesinos, envía una señal a los perpetradores de dicha violencia, da una licencia para que vuelvan a matar una vez y otra vez. En el mundo vemos que poco más de ocho de cada 10 casos nunca son resueltos; no obstante, esta tasa en México es de 99 por ciento, se encuentra entre la primera decena de países en el Índice Global de Impunidad, que ha sido elaborado por el Comité de Protección de Periodistas”. Pero no sólo eso, manifestó que se contabilizan a los profesionistas del gremio asesinados, pero no a los que han sido intimidados para censurarlos, eso, aseveró, es el costo verdadero sobre la libertad de prensa.

“Cuando analizamos dónde es que se predomina la impunidad, vemos que hay nexos entre el crimen organizado, oficiales, políticos corruptos y también con instituciones legales débiles.”

Reiteró que el país cuenta con mecanismos especiales para la protección, como la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión; “sin embargo, la tasa de impunidad se mantiene muy alta, pues sólo se han cerrado siete casos entre 2010 y 2021”.

Indicó que este es el décimo año desde que Naciones Unidas estableció un plan de acción para la protección de comunicadores y poner fin a la impunidad. “México ha participado en dichas iniciativas”.

Por su parte, Ricardo Sánchez Pérez del Pozo, titular de la fiscalía especial, indicó que de 2018 a la fecha se han obtenido más de 120 resoluciones favorables en denuncias de violencia contra periodistas, “hay más de 30 sentencias definitivas condenatorias de diferentes tipos de delitos, así como aplicación deprotocolos alternos para la solución de controversias, que son pautas justas para las víctimas, y eso es algo que hay que resaltar”.

Añadió que entre 20 y 25 por ciento de las denuncias que recibe dicha fiscalía provienen de mujeres, de las cuales, 65 por ciento corresponde a delitos de amenazas.