Buenos Aires., La nueva ministra de Economía de Argentina, Silvina Batakis, anunció ayer una serie de medidas, entre ellas la reducción del gasto, que apuntan a reducir el elevado déficit fiscal y calmar el nerviosismo de los inversionistas después de una semana turbulenta.
Batakis subrayó que Argentina mantendrá las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que contemplan una reducción este año del déficit fiscal a 2.5 por ciento del producto interno bruto (PIB).
“Es un acuerdo que firmamos como Estado y tenemos que cumplir", señaló Batakis durante su primera rueda de prensa, una semana después de asumir el cargo. Argentina suscribió este año con el organismo internacional un acuerdo de facilidades ampliadas por alrededor de 44 mil 500 millones de dólares, en remplazo del stand by que firmó el anterior gobierno del empresario Mauricio Macri (2015-19).
El nuevo convenio contempla una reducción del déficit fiscal de 3 por ciento del PIB del año pasado a 2.5 por ciento en 2022, 1.9 por ciento en 2023 y 0.9 por ciento para 2024.
Mercados cierran a la baja ante clima de desconfianza
Sin embargo, los mercados cerraron a la baja debido a que persiste el clima de desconfianza.
“Que todos los mercados entiendan que Argentina está dispuesta hacer lo que dijo la ministra esta mañana”, sostuvo Fernández a la prensa en la localidad bonaerense de Berazategui (este).
Tras destacar la obra pública número 5 mil que lleva adelante su gobierno, el jefe de Estado aseguró que la gestión de la economía se centrará en el control del gasto público.
El gobierno también continuará con “la disminución del déficit fiscal paulatinamente para que esto no se convierta en un ajuste que perjudique a la gente”, puntualizó el presidente.
Batakis, quien asumió la cartera económica hace una semana en medio de una grave disputa en la coalición oficialista de centroizquierda, manifestó que “no vamos a gastar más de lo que tenemos”, y destacó que “necesitamos dar cierto orden y equilibrio a las finanzas públicas del estado nacional”.
Batakis señaló que Argentina buscará un sendero de tasas de interés positivas, congelará el ingreso de nuevos empleados al sector público, mantendrá el programa de recortes de subsidios al consumo de servicios estipulado por la gestión anterior y se evitará gastos por encima de la proyección de caja real.
La ministra consideró que el peso argentino, actualmente bajo presión por la escasez de divisas que sufre el país, se encuentra en un valor adecuado.
Ayer, los bonos en el segmento extrabursátil local cayeron 0.3 por ciento, luego de acumular una merma de 5.8 pór ciento la semana pasada.
El peso en el mercado informal se apreció 1.87 por ciento a 268 por dólar, pero la brecha cambia-ria frente a la cotización interbancaria se ubica en 110.43 por ciento.
En tanto, el índice accionario S&P Merval cayó 1.34 por ciento y el riesgo país realizado por el banco JP. Morgan subió 17 puntos básicos a 2.667 unidades.
Algunos especialistas sembraron dudas en relación con el respaldo que el programa de Batakis tendrá por parte de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien sumergió en una crisis al gobierno de Alberto Fernández al presionarlo para impulsar la salida del ex ministro de Economía Martín Guzmán.
Fernández Kirchner, que representa al sector más radical de la alianza oficialista Frente de Todos y es considerada una de las políticas más poderosas del país, criticaba a Guzmán por sus decisiones liberales que, sin embargo, lucían menos ortodoxas que los anuncios de Batakis.