De acuerdo con un balance de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami), en materia de discriminación en el mercado laboral, grupos vulnerables y su relación con los ingresos, 14.7 por ciento de los hombres asalariados que sostienen una relación afectiva del mismo sexo, eran “trabajadores del salario mínimo” según el censo más reciente, en 2020.
Se trata de quienes reciben “un ingreso mensual menor al salario mínimo vigente en el municipio en que trabaja”. En el caso de las asalariadas en la misma situación, el porcentaje era de 12.1.
Además, 23.5 por ciento de asalariados con una discapacidad visual son parte de los llamados trabajadores del salario mínimo. Se encuentran, asimismo, 27.5 por ciento de trabajadores con discapacidad auditiva; 30.3 con una de tipo motriz; 37.8 con una de habla, y 34 por ciento de quienes tienen un problema o condición mental.
“Respecto a las personas trabajadoras del salario mínimo, en la población que se considera indígena el porcentaje de trabajadoras asalariadas en esta condición fue de 27.4 por ciento en 2020”, agregó.
La comisión subrayó que dichas cifras, así como los referentes se obtuvieron gracias a que en el último ejercicio demográfico se establecieron dichos parámetros.
Explicó que en un balance general, 18.3 por ciento de todos los remunerados eran trabajadores del salario mínimo en marzo de 2020, cuando se levantó el censo.