Lisboa. Más de tres mil bomberos y 60 aviones luchaban el domingo contra un incendio forestal en Portugal que, según las autoridades, ha dejado 29 personas heridas.

Las autoridades indicaron que 12 bomberos y 17 civiles necesitaron asistencia médica debido a heridas leves causadas por las llamas, informó la televisión estatal RTP y otros medios locales. El domingo por la tarde, la Agencia de Protección Civil de Portugal dijo que más de tres mil bomberos estaban combatiendo los incendios activos.

La Unión Europea activó el domingo su programa de asistencia a la flota aérea contra incendios, que permite a los países miembros compartir recursos para ayudar a Portugal. España, que también ha sufrido incendios forestales hace poco, respondió rápidamente enviando dos aviones extintores a su vecino ibérico, según el comisario de crisis de la UE, Janez Lenarcic.

El gobierno portugués dijo que ha desplegado 60 aviones para apoyar a sus equipos de tierra.

Portugal lleva mucho tiempo sufriendo grandes, y a veces trágicos, incendios forestales. En 2017, llamas fuera de control mataron a más de 100 personas.

La Unión Europea ha advertido que el cambio climático hace que el continente se enfrente a uno de sus años más duros en cuanto a catástrofes naturales como sequías e incendios forestales.

El primer ministro portugués, António Costa, aplazó sus planes de visitar Mozambique esta semana “en vista de las previsiones meteorológicas que indican un empeoramiento muy grave del riesgo de incendios rurales”.

El presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, canceló igualmente su viaje a Nueva York, donde tenía previsto intervenir en el Consejo Económico y Social de la ONU.

En junio, el 96 por ciento del país del sur de Europa fue clasificado como en sequía “extrema” o “severa”.

Los incendios han hecho que las autoridades aumenten el estado de alerta que ya existía. El gobierno de Portugal declaró el sábado el estado de alerta máxima que se prolongará hasta el viernes.

Al otro lado de la frontera, en España, un incendio en el suroeste llevó a las autoridades a evacuar a 30 personas de sus casas por precaución. Unos 115 bomberos apoyados por helicópteros y aviones fueron desplegados en ese incendio cerca del pueblo de El Ronquillo.