Monterrey. Rumbo a un duelo decisivo en el Premundial de Concacaf, la selección femenil mexicana sufrió una fuerte baja debido a que la zague-ra Rebeca Bernal abandonó la concentración por lesión, mientras los organizadores del certamen padecen por la escasa afición en los estadios de Monterrey.
“Tras una jugada durante el partido ante Haití, Bernal presentó un esguince cervical grado tres, por lo que se determinó su baja e incorporación a su club para rehabilitación”, informó la Federación Mexicana de Futbol sin dar más detalles.
Bernal salió en camilla durante el encuentro del jueves ante las caribeñas luego de impactarse en el poste cuando disputaba el balón con la arquera rival. En ese momento, la jugadora fue trasladada a un hospital y apenas ayer se reveló su condición de salud.
La zaguera publicó en Instagram un video donde explica su estado al tiempo que aparece con un collarín. “Afortunadamente estoy bien, no fue una fractura. Tengo un esguince. Sigo bajo observación y espero pronto me den de alta para empezar la rehabilitación y estar en la cancha lo más pronto posible”.
Después de los descalabros ante Jamaica y Haití, el Tricolor femenil debe golear este lunes a Estados Unidos, tetracampeón mundial, y esperar una combinación de resultados para alcanzar el tercer puesto del Grupo A del Campeonato W Concacaf y así aspirar al repechaje por un pase a la Copa del Mundo de 2023.
Mientras la Eurocopa femenil rompe récords de asistencia, el Premundial de Concacaf cumple su primera semana marcado por la escasa afición en las tribunas. Hasta ahora, ni el local México ni el multicampeón Estados Unidos han logrado generar interés para que la gente vaya a los estadios de Monterrey, plaza que suele apoyar a los clubes locales de Tigres y Rayadas.
“Me sorprende la poca afluencia de público a este torneo, en Monterrey es donde se registran las mayores entradas en el futbol femenil”, dijo Ramón Villa Zeballos, ex director técnico de Tigres.
El torneo arrancó el lunes con los dos mayores atractivos: Estados Unidos enfrentando a Jamaica en el partido inaugural seguido de México ante Jamaica en el cierre de jornada.
Pero la afición fue contada en el estadio Universitario y el martes, cuando entró en acción el Grupo B con Canadá, Costa Rica, Panamá y Trinidad y Tobago, el estadio de Rayados se mostraba con las tribunas vacías.
El duelo entre México y Haití vendiendo los boletos a dos por ocho dólares (160 pesos), sumaron apenas 6 mil 48 asistentes. Al menos se sentía cierta emoción en las gradas, ocupadas esencialmente por familias enteras y algunas chicas que juegan en ligas menores.
“Hemos llegado a meter más de 12 mil en un partido cualquie-ra de la Liga. En el clásico esto está a reventar”, lamentó Odette García, quien jugó en fuerzas básicas.
Villa Zeballos destacó que uno de los factores que incide en los salarios de las jugadoras son las ganancias en taquilla, las cuales se deben conjugar con buenos resultados, pero ahora las mexicanas han dado una de sus peores exhibiciones. “La gente quiere ver a un equipo ganador en su plaza”, señaló.