Desde Suiza, el dirigente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno Cárdenas, expresó todo su respaldo y solidaridad con el ex presidente Enrique Peña Nieto luego de que se inició contra él una investigación por presuntos hechos de corrupción, y sostuvo que es un distractor del gobierno federal.

El apoyo de Alito fue refrendado por el Comité Ejecutivo Nacional del PRI, que él encabeza, en un mensaje que asegura que el “trabajo comprometido por nuestro país” de Peña Nieto fue muestra de progreso y desarrollo, “algo que ya extrañamos en México”.

Pocos priístas, sin embargo, salieron en defensa del ex presidente. El diputado Ildefonso Guajardo, secretario de Economía durante el sexenio de Peña Nieto, sólo comentó que espera que “este asunto se resuelva y por el futuro de México se lleve en apego al estado de derecho”. Antes de huir de los reporteros, agregó que Peña Nieto ya dijo que está en la mejor disposición de explicar el origen lícito de su patrimonio.

El senador priísta Jorge Carlos Ramírez Marín comentó que “cuando la justicia se hace mediática, no se busca justicia, sino exposición”, y coincidió con Juan Zepeda, senador de Movimiento Ciudadano, en que exhibir a Peña Nieto cuatro años después de concluir su mandato es estrategia política del Ejecutivo federal y su partido para incidir en las elecciones del próximo año, especialmente en el estado de México.

El senador de Morena Napoleón Gómez Urrutia sostuvo que “el presidente (Andrés Manuel) López Obrador ha dado claro ejemplo de que en su gobierno no se utiliza la justicia para perseguir a opositores o dirigentes sociales, como sí se hizo en los sexenios del PRI y Acción Nacional”.

La diputada morenista Yeidckol Polevnsky señaló que quien afirma que se trata de una cortina de humo o un intento de obligar al PRI a votar a favor de las iniciativas gubernamentales no conoce a López Obrador: “Él no funciona así, es un presidente diferente, que ha demostrado ser congruente. Él no hace concertacesiones”. Destacó que el mandatario “planteó desde un principio que no habría cacería de brujas”. Su compañero de bancada, Miguel Torruco, comentó que la oposición puede acusar lo que quiera, pero el caso ya está en la fiscalía y ésta tendrá que determinar lo consecuente.