El gobierno mexicano no descarta buscar acuerdos con la empresa estadunidense Vulcan Materials Company, pese a que la firma ha sido denunciada ante instancias internacionales, tras cometer “graves daños ambientales” en Quintana Roo debido a sus actividades extractivas.
El presidente Andrés Manuel López Obrador declaró que “en el caso de Vulcan, que aquí (su filial en México) se llama Calica (Calizas Industriales del Carmen)” el espíritu de su gobierno es buscar acuerdos, porque se trata de “daños a la Hacienda pública, considerables, daños al presupuesto, al dinero del pueblo”, apuntó ayer en su habitual conferencia de prensa en Palacio Nacional.
El mandatario no profundizó sobre esos perjuicios presupuestales debido a que se dialoga para llegar a una solución. Sin embargo, hace unos días el gobierno de México presentó una denuncia contra la minera ante la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.
López Obrador ha insistido en que las actividades de esta empresa han causado daños severos en una de las zonas más bellas de Playa del Carmen, a causa de la extracción de diversos minerales que se envían para la construcción de carreteras en Estados Unidos. Ambas partes habían acordado detener las actividades extractivas, pero la compañía –de acuerdo con el presidente– no cumplió, por lo que a inicios de mayo pasado se suspendieron sus operaciones.
El Presidente recibió a finales de mayo a J. Thomas Hill, director ejecutivo de Vulcan Materials Company; sin embargo, en ese encuentro no se alcanzaron acuerdos.
“Ojalá se logre un convenio, porque se los propusimos, pero pensaron que era como antes y no cumplieron, pero no cerramos la puerta”, apuntó ayer.
El titular del Ejecutivo federal se refirió al tema tras una interrogante sobre Grupo Xcaret –a quien ha señalado de estar al lado de los “seudoambientalistas” que se oponen al tramo cinco del Tren Maya (Cancún-Tulum)– y su presunta relación con Roberto Madrazo, ex líder del PRI, ex gobernador de Tabasco y uno de los históricos adversarios políticos de López Obrador.
“Es una empresa con mucha influencia en Estados Unidos, me sorprende, porque allá existe la mala costumbre de que las empresas le pagan a los políticos, o sea, a los senadores, sí, y tienen muchísima influencia, son capaces de… Una empresa reúne a 10 senadores y firman un desplegado en contra de un gobierno”.
Evitó hablar sobre Grupo Xcaret, porque se dialoga con ese consorcio, aunque destacó que a través de un documento éste se deslindó de estar detrás de los opositores a la construcción del tramo cinco del Tren Maya y los amparos para detener la obra.
“Se están perdiendo recursos porque tienen la obra parada ya tres meses, vamos a informar cuánto se está perdiendo, porque también todos debemos asumir aquí nuestra responsabilidad ”.