Al continuar en Ginebra, Suiza, Alejandro Moreno, dirigente nacional del PRI, dejó una carta en la oficina de la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, texto que contiene su visión sobre la “persecución política que el gobierno federal de México ha emprendido en contra de los partidos políticos de oposición. Nuestra democracia está en peligro”.
El campechano, no fue recibido por Bachelet, le dijeron que no se encontraba en el lugar. Tampoco, en ningún momento respondió a la carta firmada por 15 ex gobernadores priístas quienes le demandan, que por el bien de ese partido, renuncie a continuar dirigiendo al Revolucionario Institucional.
Ayer publicitó dos videos, en el primero apareció solo a las afueras de la oficina de Bachelet, y en el segundo en la sede de la ONU en Ginebra, donde participó en la plenaria de la Internacional Socialista. Ahí continuó su reproche al gobierno de México, que “busca debilitar por todas las vías posibles a los partidos políticos de oposición y a las autoridades electorales autónomas, además de que se ha alterado el equilibrio de poderes, y tenemos una injerencia permanente por parte del Ejecutivo en el Poder Legislativo y en el Poder Judicial.”
Pide apoyo mundial
Durante su intervención de cuatro minutos acusó al presidente Andrés Manuel López Obrador y al partido Morena, de “terrorismo político, de persecución contra los opositores, y si los medios de comunicación denuncian esta situación, se les responde con ataques, por lo que pidió todo el apoyo y respaldo de la organización de partidos de los cinco continentes para que se pongan los ojos sobre México, y para que nos apoyen y nos respalden para fortalecer el respeto a los derechos humanos”.
Antes, en el documento que entregó en la oficialía de partes de la oficina de la comisionada Michel Bachelet, insiste en que el régimen mexicano actual “se acerca mucho a lo que se definiría como autoritario, ya que desde el gobierno se ataca a las autoridades electorales, tribunales, instituciones, a los medios de comunicación y a toda voz que exprese desacuerdo con su desastrosa manera de gobernar.”
Moreno Cárdenas adujo que durante los últimos tres meses “ha sido víctima de una campaña violenta y difamatoria, impulsada por la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, quien utiliza de manera sistemática espacios de comunicación y recursos públicos para exponer porciones de audio alteradas y obtenidas ilegalmentesobre su persona y sus actividades”.
