Londres. El ministro de Salud, Sajid Javid, y el de Finanzas, Rishi Sunak, dos de las más carteras importantes del gabinete británico, dimitieron ayer por “pérdida de la confianza en el liderazgo del primer ministro Boris Johnson”, tras varios meses de escándalos, el más reciente la asignación y renuncia de Chris Pincher a la subjefatura de disciplina de los conservadores en el Parlamento por denuncias de acoso sexual.

Ambos alegaron que habían perdido las expectativas de una ruptura con una cultura de tolerancia con los escándalos que tienen a Johnson a la defensiva: “Está claro para mí que esta situación no cambiará bajo su liderazgo por lo que ha perdido mi confianza”, afirmó Javid, hijo de un conductor de autobús paquistaní.

Sunak, el primer hindú en estar al frente de las finanzas de Gran Bretaña, argumentó: “La población tiene la expectativa legítima de un gobierno conducido de manera adecuada, competente y seria”. Ante las renuncias, aceptadas por la reina Isabel II, el líder de la oposición laborista, Keir Starmer, pidió convocar elecciones generales anticipadas. “El Partido Conservador está corrompido y cambiar a un solo hombre no lo arreglará”, escribió.

Nombrados por Johnson, Sunak será remplazado por Nadhim Zahawi, quien se desempeñaba como ministro de Educación, mientras Javid será sustituido por Steve Barclay, quien se responsabilizaba de la coordinación gubernamental.

A los renunciantes no les bastaron las disculpas de Johnson horas antes por haber nombrado en la subjefatura de disciplina de los conservadores en el Parlamento al legislador Chris Pincher, un líder conservador que la semana pasada dimitió y reconoció haber toqueteado, ebrio, a dos hombres, uno de ellos diputado, en un club privado de Londres.

El gobierno aseguró al inicio que Johnson no estaba al tanto de comportamientos similares de Pincher en ocasiones anteriores. Pero ese argumento se desmoronó ayer, cuando un ex colaborador del premier reveló que el jefe de gobierno fue informado en 2019, cuando era ministro de Relaciones Exteriores, que Pincher ya se había visto involucrado en un incidente de ese tipo.