Morelia, Mich., El motivo de la agresión al sacerdote Mateo Calvillo Paz, ocurrida este lunes en la cabecera municipal de Queréndaro, se debió a un incidente de tránsito, informó el gobernador Alfredo Ramírez, quien sostuvo que este hecho se pretendió, mediáticamente, englobarlo con el asesinato de dos jesuitas en Chihuahua.
En conferencia de prensa, el mandatario estatal exhortó al cura que forma parte de la Arquidiócesis de Morelia a que presente la denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE), no obstante, la dependencia estatal está llevando a cabo las investigaciones por lo publicado en medios informativos.
“El hombre que agredió a puñetazos al padre Calvillo no estaba armado, ni sabía que era cura la persona con la que había tenido un incidente de tránsito, lo que no significa que deba justificarse el hecho, por lo que se tiene que investigar y de ser necesario sancionar al agresor por el delito de lesiones, si así lo considera un juez”, aseguró.
El arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos negó que exista persecución al clero en Michoacán y descartó que haya sido por su condición de párroco la agresión al padre Mateo. “Lo que le sucedió al padre pudo pasarle a cualquiera, no lo agredieron por ser sacerdote, fue un accidente que le pasa a cualquier ciudadano en algún camino”.
El padre Mateo manifestó que el lunes cuando iba a bordo de su vehículo, un auto le cerró el paso y su conductor lo bajó violentamente del automotor, luego lo golpeó en la cara. El también columnista del diario La Voz de Michoacán no declaró que había sido por un incidente de tránsito.