Nueva York. Los precios del petróleo se desplomaron alrededor de diez dólares por barril este martes, en su mayor baja porcentual desde marzo, y el declive se propagó a otros sectores relacionados con la energía en medio de los temores sobre una recesión mundial.
En este contexto, el valor de la mezcla mexicana de exportación cayó a 95.13 dólares el barril, informó Petróleos Mexicanos (Pemex). Se trata de una reducción de 7.65 dólares respecto al cierre del viernes, ya que Pemex no publicó el precio de la mezcla el lunes por feriado en Estados Unidos.
Con ello, el crudo mexicano registró el precio más bajo desde el 10 de mayo y es la primera vez desde esa fecha que desciende de cien dólares.
El estadunidense West Texas Intermediate (WTI) también cerró por debajo de la cota simbólica de cien dólares por primera vez en dos meses, al hundirse 8.93 dólares (8.24 por ciento) y quedar en 99.50 dólares el barril, un mínimo desde el 11 de mayo.
Por su parte, el referente europeo Brent se derrumbó 10.73 dólares (9.45 por ciento) a 102.77 dólares el barril.
Ambos referenciales registraron su mayor declive porcentual diario desde el 9 de marzo y golpearon las acciones de las principales compañías de petróleo y gas.
“Estamos siendo aplastados y la única forma de explicarlo es el miedo a la recesión”, dijo Robert Yawger, director de futuros energéticos de Mizuho. “Se está sintiendo la presión”, apuntó.
Los contratos del petróleo se hundieron junto con el gas natural, la gasolina y la renta variable, que suele servir de indicador de la demanda por crudo.
El mercado petrolero “se desvía de la inflación” y se dirige hacia la “desesperanza económica”, afirmó Stephen Innes, analista de Spi Asset Management. Los temores de recesión mundial se volvieron más importantes que “los problemas de abastecimiento más evidentes”, que quedaron “relegados a un segundo plano”, afirmó.
En la zona euro, datos mostraron que el crecimiento empresarial en todo el bloque se ralentizó aún más el mes pasado, y los indicadores prospectivos sugieren que la región podría entrar en una caída este trimestre, ya que la crisis del costo de la vida mantiene a los consumidores recelosos.
“El riesgo de recesión en la zona euro parece inevitable”, sostuvo Neil Wilson, analista de Markets.com.
En China, Shanghái dijo que comenzaría nuevas rondas de pruebas masivas de covid-19 a sus 25 millones de residentes, reavivando las preocupaciones sobre posibles cuarentenas.
Además la demanda por la seguridad de los bonos del Tesoro impulsó al dólar alrededor de 1.3 por ciento, lo que a su vez afectó al petróleo denominado en el billete verde, ya que se vuelve más caro para los compradores que tienen otras monedas.
Arabia Saudita, el mayor exportador de petróleo del mundo, elevó los precios del crudo para agosto a los compradores asiáticos hasta niveles casi récord, en un contexto de una oferta ajustada y una fuerte demanda.
Por su parte, el expresidente de Rusia, Dmitri Medvedev, afirmó que una supuesta propuesta de Japón para limitar el precio del petróleo ruso a la mitad de su nivel actual supondría menos petróleo en el mercado y podría hacer que los precios superen los 300 o 400 dólares por barril.