Las fuertes lluvias registradas la noche del sábado y la madrugada del domingo provocaron que se desbordara la presa Becerra, en Álvaro Obregón, y la carretera Picacho-Ajusco se convirtiera en un río que arrastró vehículos y desprendió pedazos del pavimento, sin registrarse lesionados,.
En la zona del Ajusco Medio, en Tlalpan, se registraron 39.8 milímetros de lluvia y su escurrimiento provocó que dicha carretera se inundara desde el cruce con la calle Conakal hasta el entronque con Anillo Periférico Sur.
Algunos vehículos, entre ellos una ambulancia, fueron arrastrados por la corriente que abarcó los cuatro carriles de circulación con dirección al Periférico, provocando que vallas metálicas fueran desplazadas y el agua cubriera banquetas y rampas de negocios.
Personal del Operativo Relámpago de la alcaldía acudió al lugar y atendió los reportes de tres casas donde el agua ingresó, ubicadas entre las calles Tekit y Homun, en la colonia Héroes de Padierna. Levantó las cédulas del siniestro para cubrir los daños.
La alcaldía informó que se mantiene vigilancia permanente luego de que alrededor de las 13 horas de ayer concluyó el desazolve en las vialidades afectadas.
La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil informó, a su vez, que las lluvias provocaron el desbordamiento de la presa Becerra, en Álvaro Obregón, sin reportarse afectaciones mayores, sólo vialidades llenas de lodo y basura.
Personal del Sistema de Aguas y de la Secretaría de Obras tardaron más de 10 horas en las labores de limpieza de la presa, las cuales concluyeron a las 16 horas. Ambas dependencias hicieron un llamado a los ciudadanos a no tirar basura.