Londres. El serbio Novak Djokovic, seis veces campeón y vigente defensor del título, se metió el viernes sin apenas despeinarse en octavos de final de Wimbledon, donde el joven español Carlos Alcaraz ganó confianza y autoridad avanzando como un rayo.
Djokovic se mostró sin piedad en tercera ronda contra su compatriota Miomir Kecmanovic, número 30 del mundo, al que se impuso por 6-0, 6-3 y 6-4 en una hora y 52 minutos en la pista central del All England Club londinense.
"Comencé muy, muy bien, con mucha intensidad", afirmó satisfecho el número dos del mundo después de firmar su victoria 330 en Grand Slam.
"Eso quiere decir que juego desde hace muchos años", bromeó antes de reconocer que está "muy orgulloso" de su constancia al más alto nivel.
En octavos se enfrentará a la sorpresa holandesa, Tim van Rijthoven (104º del mundo) que, al cabo de un largo periodo de lesiones, disputa su primer torneo de Grand Slam invitado por los organizadores del torneo sobre hierba inglés.
A sus 35 años, Djokovic aspira a sumar un cuarto título consecutivo en Wimbledon, algo de lo que sólo Pete Sampras, Björn Borg y Roger Federer pueden presumir (cinco títulos seguidos el sueco y el suizo).
En caso de victoria final, el serbio conquistaría su título 21 de uno de los cuatro grandes torneos, quedándose a solo uno de distancia del español Rafa Nadal. Este podría ser además el último Grand Slam del año para Nole, ya que sin vacunarse contra el covid-19 no podrá disputar el US Open.
En la quinta ronda, Wimbledon podría ver un enfrentamiento generacional entre el veterano serbio y el más joven jugador que pasa a octavos de final, Alcaraz.
Antes, sin embargo, el español de 19 años tendría que vencer a su "amigo" Jannik Sinner, número 13 del mundo y solo un año mayor que él.
El italiano se impuso por 6-4, 7-6 (7/4) y 6-3 en tercera ronda al rocoso estadounidense John Isner, de 37 años y más de dos metros de estatura.
Alcaraz, "mejor" cada día
"Todo el mundo conoce el nivel de Sinner, es un gran jugador, un jugador muy agresivo, será un partido muy divertido", afirmó Alcaraz, apuntando que ambos tenistas son "amigos fuera de la pista".
"Pero en la pista será un combate y espero que los espectadores lo disfrutarán", afirmó ante el público de la pista número uno, puesto en pie para ovacionarle tras su fulminante victoria contra alemán Oscar Otte por 6-3, 6-1 y 6-2.
"Probablemente este ha sido el mejor partido sobre hierba que jamás he jugado", afirmó Alcaraz.
La nueva estrella del tenis español, que en primera ronda disputó un largo y duro partido contra el también alemán Jan-Lennard Struff, no ha dejado de mejorar desde entonces sobre una superficie a la que no está acostumbrado.
"Es duro jugar sobre hierba", reconoció, pero "Wimbledon te da una energía especial", afirmó. "Intento ser mejor en cada partido, cada día, y diría que en la próxima ronda seré un mejor jugador", agregó.
Alcaraz hizo disfrutar al público con sus puntos extraordinarios, llegando in extremis a las bolas, tirando a las líneas con ángulos imposibles y acabando con pesadas dejadas.
Pese a intentar ser más agresivo, Otte, 36 del mundo, no encontró soluciones, pareció nervioso, hizo dobles faltas y encajó rotura tras rotura.
Alcaraz se impuso sin discusión, con el saque y con el resto, tomando riesgos, y cometiendo pocos errores, mientras los espectadores jaleaban "¡Vamos Carlitos!".
Por su parte el cuatro femenino quedó muy abierto, con ya solo cuatro cabezas de serie aún en el torneo.
Maria Sakkari y Angelique Kerber, eliminadas en el All England Club
Maria Sakkari se convirtió el viernes en la sexta cabeza de serie femenina en caer antes del final de la tercera ronda.
La griega perdió por 6-3 y 7-5 ante la alemana Tatjana Maria, número 103 del mundo, que regresó al circuito el año pasado tras una baja por maternidad.
"Me siento increíble, es la primera vez que estoy en octavos de final. Ganar a Sakkari es impresionante", aseguró la alemana.
También se despidió la campeona de 2018, la alemana Angelique Kerber, decimoquinta cabeza de serie, derrotada por la belga Elise Mertens.
La que pasó a octavos sin problemas fue la tunecina Ons Jabeur, que venció sin dificultad a la francesa Diane Parry, de 19 años, por 6-2 y 6-3.