Ciudad de México. Ante el retiro de varias unidades de transporte concesionado de pasajeros por no cumplir con los requisitos para brindar el servicio, como contar con licencia C, seguro contra accidentes, no portar el uniforme reglamentario y circular con vidrios polarizados, decenas de personas se han visto obligadas a hacer largas filas en el paradero sur del Metro Taxqueña en busca de un vehículo que los pueda trasladar.
Además, muchos conductores no usan cubrebocas al que están obligados. Durante un recorrido por dicho paradero se pudo apreciar la circulación de unidades sin contar con la cromática que establece la norma y que incluye el número de la ruta, la placa y que estén bien pintadas; las que se vieron sin el rótulo son de tipo microbús.
Mientras tanto, en el paradero del Metro Pantitlán algunos conductores llevan el uniforme colgado en la unidad y sólo si hay operativo lo visten.
Otros más advierten que la mayoría ya acata la disposición de usarlo, aunque no tienen muy claro cómo debe ser, ya que unos indicaron que es camisa blanca y pantalón negro, pero algunos que es pantalón negro y camisa azul, mientras varios no lo traían hasta que se les abordó para preguntarles por qué no lo llevaban.
En el paradero del Metro Taxqueña algunos microbuses circulan sin la cromática autorizada y con vidrios polarizados, lo cual está prohibido. Foto Luis Castillo.
Lo mismo ocurrió con el cubrebocas, ya que al interrogarlos por qué no lo usaban alegaron que iban a comer o estaban comiendo.
Desde que empezaron los operativos el 15 de junio, y hasta el martes pasado, el Instituto de Verificación Administrativa (Invea) y la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) han sancionado a 543 choferes por no llevar la licencia vigente tipo C, seguro contra accidentes actualizado, no portar uniforme, traer un acompañante, que la unidad tenga vidrios polarizados o no esté con cromática completa.
De esta cifra, 275 operadores han sido castigados por carecer de licencia vigente y 121 por la falta de uniforme.
Al respecto, la Secretaría de Movilidad (Semovi) informó que como parte de los operativos de revisión al transporte público concesionado en dos semanas se inspeccionaron 7 mil 246 unidades. unidades
Mientras en el centro de transferencia de Pantitlán los pasamanos sirven como perchero de uniformes que nadie sabe exactamente el color de la camisa permitida. Foto Luis Castillo.
Mejoró un poco el servicio, pero se afectó al bolsillo
Para usuarios como Matilde Velázquez, vecina de la colonia Torres de Padierna, el servicio ha tenido algunas mejoras tras el incremento de un peso, “ya no tardan tanto y no van echando carreras, pero todavía les falta que sean respetuosos con la gente porque hay algunos choferes que son groseros con las personas, cuando alguien les dice ‘oye, bájale a la música’, se ponen muy altaneros”.
Entrevistada en el paradero de Taxqueña, agregó que el incremento le ha impactado bastante: “Con el salario que tenemos no nos alcanza, ya teníamos prevista la cantidad exacta para nuestros traslados y algunos como los que salen de Mexicaltzingo están cobrando hasta siete pesos. Yo tomo varios transportes, primero, desde su pobre casa un camión a CU y luego tengo que ir a otro lado y ya de regreso tengo que tomar tres transportes”.
En medio del recorrido por esa terminal, el chofer de la unidad 0010140 de la ruta Taxqueña-Santa Cruz, Francisco Ramírez, denunció malas prácticas en los operativos y explicó que la mañana de ayer personal de la Semovi le indicó que sería puesto a disposición del Ministerio Público porque presuntamente no traía licencia.
Sin embargo, minutos antes otra persona de la misma dependencia acompañado por policías se la habían retirado; ante dicha anomalía, los efectivos le reintegraron su documento, aunque a su camión le colocaron sellos y tendrá que permanecer parado en su domicilio.
Ante el temor de ser castigados, los concesionarios prefieren no trabajar, de ahí la falta de unidades. Foto Luis Castillo.