De “factor especialmente desestabilizador” calificó este miércoles la ampliación de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) el vicecanciller ruso, Serguei Ryabkov, en una primera reacción oficial a la adhesión de Finlandia y Suecia, que Moscú desaprueba; al aumento de tropas y armamento junto a sus fronteras, que no los intimida y será contestada; y a la acusación de que Rusia es la “mayor amenaza” para la alianza noratlántica, que en su opinión es ésta la que representa un peligro para la seguridad de Rusia.
“Nuestra posición es conocida, no cambia, consideramos la ampliación de la OTAN como un factor especialmente desestabilizador a nivel internacional, es una política irresponsable y que destruye la arquitectura de defensa en Europa”, afirmó Ryabkov ante un grupo de medios rusos y apuntó que el ingreso de Finlandia y Suecia “no añade seguridad ni a quienes se amplían ni a quienes ingresan, ni al resto de los países que ven a la OTAN como una amenaza".
Indicó también: "Tengo grandes dudas respecto hasta qué punto serán tranquilos los próximos tiempos para nuestros vecinos nórdicos. En fin de cuentas, ellos ceden a Washington parte de su soberanía en materia de política exterior y de defensa".
Y en cuanto al incremento de las tropas y armamento junto a sus fronteras, Ryabkov subrayó: "Creen que podrán intimidar a Rusia, contenerla de alguna manera. No tendrán éxito, no nos quedaremos de brazos cruzados, tenemos la capacidad y los recursos para garantizar nuestra seguridad al cien por ciento”.
Optimismo en Jersón
En Jersón, región ucrania colindante con Crimea, las autoridades impuestas por el ejército ruso siguieron este miércoles dando pasos para preparar el terreno de lo que ya han anunciado como meta de su gestión: celebrar en fecha aún no determinada un referendo que legitime su separación de Ucrania y eventualmente su incorporación a Rusia, si el Kremlin aprueba que también lo hagan Donietsk y Lugansk, cuya independencia ya reconoció.
Por lo pronto, para acelerar su eventual integración con Rusia, la administración de Jersón anunció que pronto empezarán a circular trenes hacia Crimea y, a partir del viernes de esta semana, habrá un servicio de autobús dos veces al día hacia Simferopol, la capital de Crimea.
Desde hace algún tiempo, se están abriendo registros civiles que expiden a quien lo solicite la ciudadanía rusa, escuelas donde se enseñará en ruso y sucursales de bancos de Rusia, toda vez que declararon el rublo como moneda oficial de la región.
Aseguran que también habrá comunicación terrestre entre Simferopol y las ciudades de Melitopol y Berdiansk, en la región ucrania de Zaporiyia, parcialmente bajo control del ejército ruso.
Llama la atención este optimismo de las autoridades porque no es claro qué puede pasar en Jersón: las últimas semanas el ejército ucranio ha comenzado a recuperar terreno en esa región, toda vez que el grueso de las fuerzas rusas se concentra en el Donbás.