Chimalhuacán, Méx. Más de dos millones y medio de pesos no presupuestados, ha desembolsado el ayuntamiento luego del incendio que consume, desde mayo pasado, más de seis hectáreas de basura en el tiradero Escalerillas. Aunque el siniestro continúa, las autoridades locales esperan sofocarlo este fin de semana.

La alcaldesa morenista Xóchitl Flores, detalló que la inversión no prevista en el gasto corriente ha mermado las finanzas públicas, porque ahora se erogan recursos en la renta de maquinaria para los trabajos de remoción de escombros; el salario y alimentos de las cuadrillas de trabajadores.

Pero, también se ha invertido presupuesto, en el traslado de las 350 toneladas de desechos domésticos y urbanos que todos los días genera Chimalhuacán, los cuales son enviados al relleno sanitario privado Peña del Gato.

El pasado 28 de mayo se registró el incendio, que lleva un mes activo generando contaminación ambiental en toda la zona oriente del Valle de México, derivando en la clausura del tiradero Escalerillas ubicado en la parte alta del cerro en el Ejido Santa María Chimalhuacán.

La presidenta municipal, informó que solo por el traslado y confinamiento final de los residuos, su gobierno ha desembolsado más de un millón de pesos en las últimas semanas. Otro millón y medio se ha utilizado para las maniobras de sofocamiento del incendio.

“Es una gran inversión” que no está contemplada en el gasto programado para este ejercicio fiscal, pero que, a final de cuentas, fue necesario desembolsar para atender la emergencia.

Aún falta resolver el tema del saneamiento del basurero, como lo ordenó la Procuraduría Ambiental y para cumplir con el ordenamiento se necesitará de más dinero.

“Todo se ha hecho con recurso propio, hemos estado platicando con las instancias estatales”, para ver si hay apoyo económico porque aún falta el dictamen final tras la suspensión de actividades.

Se está pidiendo, a la dependencia estatal, no se imponga multa económicamente a la actual administración por el siniestro, ya que consideró que la situación es consecuencia del abandono y negligencia administrativa por parte de las autoridades del trienio anterior.

Por lo mientras, Chimalhuacán no tiene un depósito propio y continuarán llevando la basura a Peña del Gato. Sin embargo se analizan alternativas como la adquisición de un nuevo predio, que cumpla con los requisitos básicos, entre estos que se encuentre situado a una distancia mínima de 500 metros en torno al caso urbano.