La Confederación Internacional de Trabajadores (CIT), que encabeza el senador Napoleón Gómez Urrutia, solicitó al presidente Andrés Manuel López Obrador su intervención en el caso del líder sindical Hipólito Rojas, detenido injustamente por un juez local de Oaxaca, quien dictó prisión preventiva e incluso desestimó jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Detrás de esa “detención arbitraria” de Rojas, quien preside la Federación Internacional de Trabajadores de Oaxaca, están dirigentes locales de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (Catem), quienes pretenden “obligarlo a cederles rutas de transporte de municipios oaxaqueños, además de arrebatarle el contrato colectivo del ramo”, comentó el representante jurídico de la CIT, Nahir Velasco.
Explicó que Rojas fue acusado falsamente de intento de asesinato de un dirigente de la Catem y detenido hace dos semanas, en las que han dado la batalla legal para liberarlo. Sin embargo, el juez de control Jorge Félix Toledano rechazó aplicar una jurisprudencia de la SCJN, la cual establece –explicó– que en el caso de tentativa de homicidio, el proceso debe llevarse en libertad.
“Es más un tema político que jurídico. Es una abierta ilegalidad contra Hipólito, porque una jurisprudencia es una interpretación del máximo tribunal del país y tiene la misma capacidad obligatoria que la Constitución”, aseveró el abogado.
Explicó que hace un par de semanas, cuando Rojas acudía a una cita médica en un hospital privado en Oaxaca, fue detenido por elementos estatales de seguridad por el presunto delito de tentativa de homicidio.
En una carta dirigida al presidente López Obrador, que la CIT entregó a Atención Ciudadana de la Presidencia el 20 de junio pasado, esa confederación resaltó que entregaron “pruebas contundentes y definitivas de la inocencia de Hipólito Rojas”, entre ellas dos videos, en los que se le observa en la recepción del nosocomio, a donde ingresan siete personas vestidas de civil, con gorras y cubrebocas para detenerlo de forma agresiva”.
Resalta que quienes “agredieron a Hipólito Rojas son los dirigentes locales de la Catem, Eduardo Villaseñor y Ezequiel El Chequecito, que forman parte de la Confederación Joven de México” y quienes regularmente actúan de esa forma ilegal.