Como un homenaje al bailarín y coreógrafo Arturo Garrido, quien falleció el 28 de mayo pasado, la compañía potosina Proyecto Coyote estrenó la obra Dicoplus el pasado 24 de junio en el Salón de Danza de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); la última función será este domingo.

Fundada en 1998 por el bailarín y coreógrafo ecuatoriano Arturo Garrido, Proyecto Coyote surgió como una propuesta escénica alternativa que busca interpretar desde un lenguaje contemporáneo al hombre actual. Los teatros, calles y pueblos de México, Colombia, Ecuador y Venezuela han sido los escenarios de esta agrupación que durante más de 20 años se ha dedicado a la producción, difusión e investigación dancística.

En entrevista con La Jornada, Alejandra Mendoza, viuda del coreógrafo y coordinadora artística del grupo, expresó que la muerte del maestro Garrido ha sido muy dura y triste, pero consideran que “el mejor homenaje es llevar a conclusión lo que él tenía preparado. Ya estaba en los últimos ensayos de Dicoplus; por eso vamos a dar una temporada en el Salón de Danza UNAM”.

La obra gira alrededor de dos protagonistas que se enfrentan y se anulan mutuamente. En Dicoplus se manifiesta una batalla entre el ser y su doble o entre el yo y la huella. La propuesta coreográfica plantea los pasos de una conformación. El campo de batalla es el protagonista dividido entre él y el otro, la resistencia; es decir, una coexistencia no pacífica.

“Dicoplus es una obra que el maestro trabajó el año pasado dentro de su proyecto del Sistema Nacional de Creadores; este año tenía la intención de dar difusión al proyecto. Tenemos contemplado en la función del domingo hacer un conversatorio al final, como un pequeño homenaje al maestro para hablar de su trayectoria y lo que dejó en México, porque era de nacionalidad ecuatoriana, pero a veces me preguntó si uno no es del lugar donde ha pasado la mayor parte de su vida; creo que él era mexicano”, comentó Mendoza.

Movimientos llenos de energía

Al recordar el trabajo de Garrido, explicó que el coreógrafo “desarrolló un lenguaje propio relacionado con su temperamento, era un movimiento muy aéreo, lleno de energía, pero siempre procuraba que dentro de éste hubiera una apropiación de los bailarines, que lo hicieran suyo también.

“A veces había modificaciones porque le interesaba la apropiación del movimiento, pero su movimiento siempre fue vertiginoso, aéreo y energético.”

Mendoza indicó que a pesar de las tendencias en la danza, al maestro Garrido siempre le gustó el movimiento, bailar. También sostuvo que el coreógrafo trabajaba mucho con grupos; “decía que una coreografía debía tener como mínimo 10 bailarines. Siempre se imaginaba ese manejo de la escena de grandes grupos”.

Otra característica de Garrido que recordó Mendoza fue que el coreógrafo siempre llevaba a los intérpretes a esa energía vertiginosa sin importar el nivel que tuvieran, ya sea como profesionales o estudiantes.

La coordinadora artística comentó que este año seguirán con los proyectos que el maestro Garrido tenía planeados, como la presentación que tendrán en julio como parte del Festival Internacional de Danza Contemporánea Lila López en San Luis Potosí. “Por el momento es difícil visualizar qué sucederá después de estos compromisos; todavía estamos con este sentimiento de la pérdida. Es difícil, pero confío en que tendrá que continuar Proyecto Coyote”.

Dicoplus, coreografía de Arturo Garrido, se presenta hoy a las 18 horas en el Salón de Danza UNAM, del Centro Cultural Universitario (Insurgentes Sur 3000, Ciudad Universitaria).