Kassel. Tras el escándalo que sacudió el inicio de la muestra de arte contemporáneo documenta en la ciudad alemana de Kassel, el colectivo de artistas responsable de la obra People’s Justice rechazó las acusaciones de antisemitismo.

El grupo Taring Padi de Indonesia se manifestó decepcionado por cómo la dirección de documenta gestionó la crisis, según informó ayer la revista Der Spiegel.

“No sabíamos que nuestra vieja pintura heriría los sentimientos en Alemania. Se ha mostrado a menudo en exposiciones. Si hubiéramos sabido cuáles iban a ser las reacciones, nunca la habríamos colgado”, declararon los artistas a la publicación germana.

El colectivo dijo que juzgó de forma errónea el efecto que tendría la obra, de hace 20 años y que busca reflejar las luchas por la libertad en Indonesia a finales de la dictadura de Suharto.

“Pensé que como artista, especialmente en un país como Alemania donde hay libertad de expresión, se te permite desafiar más límites”, declaró Sri Maryanto, miembro del colectivo que vive y estudió en Múnich, según Der Spiegel.

La enorme pintura de Taring Padi fue retirada el martes. En la obra aparece un soldado con cara de cerdo, lleva un pañuelo con una estrella de David y un casco con la inscripción “Mossad”, el nombre del servicio de inteligencia exterior israelí. Esto desencadenó fuertes críticas.

El artista consideró que los sucesos de Kassel y la forma en que se manejaron fueron “un shock” para el colectivo. “No somos antisemitas. Ni siquiera sabemos quién nos juzga aquí. Sólo lo leemos en los periódicos”, sostuvo.

El grupo cree que el hecho de que la imagen de People’s Justice (Justicia popular) se lea como antisemita es un problema de interpretación intercultural.

“Estamos sorprendidos. Pero estamos abiertos y dispuestos a escuchar. Eso forma parte del aprendizaje colectivo. Cuando algo va mal, intentamos entendernos. Aceptamos las consecuencias. Por desgracia, nadie habló con nosotros al principio”, lamentó.

Los curadores de documenta, el colectivo de artistas Ruangrupa también de Indonesia, se disculparon ayer en una declaración escrita. “Todos fallamos en la detección de las figuras antisemitas en la obra”, escribió Ruangrupa en la página web de documenta.

“Es nuestro error. Pedimos disculpas por la decepción, la vergüenza, la frustración, la traición y la conmoción que hemos causado a los espectadores”, expresaron los curadores.