De todo el territorio nacional, la región hidráulica Aguas del Valle de México –la más poblada del país– tiene el mayor grado de presión, enfrenta escasez de agua y tiene la menor disponibilidad per cápita de agua renovable, señaló la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Con una cantidad de 143 metros cúbicos de agua por persona al año, se encuentra en una situación de “escasez absoluta”.
En las más recientes Estadísticas de Agua de México 2019, divulgadas este año y con datos a 2018, por lo que hasta ahora se carece de información de 2019 a 2021, se indica que la región del valle de México para el periodo de 2018 a 2030 se prevé que “tenga escasez de agua y un grado de presión muy alto”.
Agrega que las regiones hidrológicas administrativas de Península de Baja California y Río Bravo, donde se halla Nuevo León, “tenderán a incrementar su situación de estrés pasando a escasez”. Mientras la región de Lerma-Santiago-Pacífico, que abarca el estado de México, Michoacán y Jalisco, mantendrá nivel de estrés con alto grado de presión.
El documento refiere que el impacto del crecimiento de la población en los recursos hídricos disponibles de aguas superficiales y subterráneas se observa a través del indicador agua renovable per cápita, que determina el volumen de agua disponible por habitante y es posible asociarlo con niveles de escasez y estrés, y menos de 500 metros cúbicos indica escasez absoluta.
A 2018, el valle de México tenía 143 metros cúbicos por persona al año y para 2030 se prevé que sean 134 metros cúbicos. Esto contrasta con los 18 mil 581 metros cúbicos que tenían los habitantes de la frontera sur en 2018, los cuales bajarán a 16 mil 643 en 2030.
Se desaprovecha el agua de las lluvias
Por su parte, la organización The Climate Reality Project América Latina, consideró que las altas temperaturas ocasionadas por el cambio climático, la alta demanda de agua, la mala distribución y las fugas que no se atienden han agravado la sequía, y esto se refleja en que México sea uno de las 25 naciones con mayor estrés hídrico, según el Instituto de Estudios Mundiales.
En un comunicado, planteó que en la Ciudad de México se registra una precipitación media anual de 682 mil metros cúbicos, pero por lo menos 72 por ciento de ella se evapora, por lo que una buena gestión y almacenamiento del agua contribuiría a disminuir significativamente la problemática que se vive en el país. Recomendó recolectar agua de lluvia, atender las fugas de agua, evitar su desperdicio, tomar duchas de máximo cinco minutos y lavar la ropa con jabones biodegradables de forma que esa agua se pueda reutilizar.