Ciudad de México. En el Teatro del Pueblo, ayer se presentaron 17 quinceañeras y un joven de la misma edad, todos hijos de reclusas de Santa Martha Acatitla, que tendrán un festejo el 8 de julio.
La celebración incluirá, como regalo por parte de comerciantes, los vestidos y un traje, cada uno con valor de 6 mil 500 pesos, comentó José Luis Santiago, presidente de la asociación Calle de las Novias y Ceremonias.
Para los jóvenes será una fiesta de ensueño, muy tradicional, que incluirá misa, pastel, tres valses que interpretará la Filarmónica Iberoamericana, un diseño de maquillaje, zapatillas, fotografías en las escalinatas del Antiguo Palacio del Ayuntamiento, así como un recorrido en el Turibús.
Cada familia aportará sus propios platillos y las madres podrán invitar a 10 personas; para hacerse acreedores a la celebración, los festejados debieron mejorar su rendimiento escolar y sus calificaciones.
Las jóvenes estarán a las 6 de la mañana en una sesión de maquillaje, posteriormente abordarán el Turibús que las paseará por calles del primer cuadro; después descenderán en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento para una sesión de fotos con el secretario de Gobierno, Martí Batres, y el coordinador de la Autoridad del Centro Histórico, Manuel Oropeza, quienes las apadrinarán.
La fiesta será en el reclusorio, donde cada una contará con un chambelán que la acompañará en su vals y la fiesta estará amenizada por el grupo Tepito All Star.
El padrino del pastel será Enrique Serrano, subsecretario de Sistemas Penitenciarios, y será elaborado por personal del penal.
Luego de entregarles su último juguete, Oropeza dijo que el evento es un esfuerzo para coadyuvar en el proceso de la reinserción social de quienes están privadas de la libertad y fortalecer los lazos familiares.