Ante el fuerte incremento del costo de los insumos y de las materias primas, los refrescos y bebidas no alcohólicas elevaron sus precios entre 6 y 6.5 por ciento, por debajo de la inflación interna registrada en el sector de hasta 15 por ciento.
Alonso Gasque, director general de Bepensa Bebidas, una de las embotelladoras más grandes del país, afirmó que la emisora, que incursionó por primera vez en el mercado de deuda de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), ha tratado de ser sensible con los consumidores, pero el ajuste en los precios de sus más de 400 productos realizado a principios de este mes ya estaba programado.
El directivo de Bepensa Bebidas, una de los embotelladores más grandes de The Coca Cola Company en América Latina y establecida en la península de Yucatán, destacó que el reto es encontrar el balance para no subir más los precios de las bebidas a pesar del elevado costo de los insumos, como una forma de apoyar a los consumidores que tienen que lidiar con el incremento generalizado de la canasta básica.
Y es que durante el primer semestre del año la industria registró riesgos importantes en el incremento de los costos de las materias primas que utilizan para elaborar sus bebidas y refrescos. Gasque confía en que el tema de la inflación sea temporal.
En conferencia de prensa, al tocar el tema del problema de la falta de agua que se registra en el norte del país, Alonso Gasque sostuvo que si bien la embotelladora no se encuentra en una zona de estrés hídrica se toman las medidas necesarias para ahorrar y hacer un mejor uso del líquido.
“No operamos en una región de estrés hídrico; pero tenemos programas de ahorro de agua, ya que devolvemos más de 108 por ciento de agua que extraemos. Asimismo, desde 2018 hasta el primer trimestre de 2022 hemos realizado un ahorro de lo que equivale el consumo de 3 mil 500 hogares en un año.”
Debut en la bolsa
Bepensa Bebidas debutó en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y colocó dos emisiones de certificados bursátiles a largo plazo por un monto de 2 mil 500 millones de pesos con una vigencia de cinco y siete años, respectivamente, como parte de su programa autorizado por un monto de hasta 10 mil millones de pesos con una vigencia de cinco años.