Jerusalén. Apenas un año después de llegar al poder, la coalición liderada por el premier israelí, Naftali Bennett, sorprendió ayer a todo el país al anunciar su intención de disolver el Parlamento para convocar las que serían las quintas elecciones en menos de cuatro años.

“Mi amigo Yair Lapid, ministro de Relaciones Exteriores, y yo, hemos decidido disolver el Parlamento y acordar una fecha para las nuevas elecciones”, dijo Bennett en un discurso emitido en todos los canales israelíes

Bennett y Lapid habían lograron en junio de 2021 una coalición única en la historia de Israel que juntaba a partidos de derecha, centro, izquierda y, por primera vez, a una formación árabe, para poner fin a los 12 años consecutivos de Benjamin Netanyahu al frente del gobierno.

El acuerdo de coalición entre Bennett y Lapid también preveía la rotación entre ambos al frente del Ejecutivo y la sustitución de Bennett por Lapid en caso de disolución del Parlamento.

Si el proyecto de ley es aprobado por los diputados, Lapid se convertirá en el nuevo premier de Israel hasta que se forme nuevo gobierno.

Lapid se convertirá “pronto” en premier, confirmó Bennett, al prometer respetar el acuerdo entre ambos.

La coalición tuvo que enfrentarse a la cuestión de la renovación de la legislación sobre los colonos, que permite aplicar las leyes israelíes a los más de 475 mil colonos que viven en Cisjordania ocupada.

Este texto, en vigor desde el inicio de la ocupación israelí de Cisjordania, en 1967, es ratificada cada cinco años por el Parlamento.

Pero la oposición, que apoya mayoritariamente esta ley, logró el 6 de junio reunir mayoría de votos contra la renovación del texto, con la esperanza de mostrar las tensiones internas de la coalición.

La ley debía renovarse antes del 30 de junio o los colonos israelíes en Cisjordania perderían su protección legal según la ley israelí. Sin embargo, si la Cámara de Diputados se disolvía, la ley se prorroga en automático.

En este contexto, la oposición liderada por Netanyahu, acusado de corrupción, amenazó con presentar un proyecto de ley para disolver el Parlamento mañana.